Plexus propone a la Xunta cambiar las pantallas del Proyecto Abalar que investiga la jueza 

La tecnológica compostelana Plexus ha solicitado a la Axencia para a Modernización Tecnolóxica de Galicia, un organismo adscrito a la Presidencia de la Xunta, cambiar las pantallas interactivas con las que ganó el concurso de 15 millones de euros para suministrar esta tecnología a los colegios gallegos en el marco del Proyecto Abalar.

La licitación se desarrolló el año pasado y Plexus compitió con el equipo proporcionado por Linux Tecnology, una empresa con sede en Fuenlabrada. Esta última fue la que aportó la pantalla de la marca Synetech que obtuvo la mejor valoración técnica en el proceso y la entregó como muestra vinculante. La compañía compostelana se hizo con la adjudicación por 14,75 millones en un concurso que se resolvió en noviembre del año pasado, con la publicación de las puntuaciones, y se formalizó el pasado enero, con el contrato entre Amtega y Plexus.

Entre estos dos hitos, la relación entre las empresas aliadas saltó por los aires. Hasta tal punto que Linux Tecnology presentó una querella, admitida a trámite en el Juzgado de Instrucción número 2 de Santiago, en la que acusa a Plexus de reemplazarla por Sibucu 360–sociedad propietaria de MoonOff que vendió 30 millones de euros en mascarillas el año del Covid— e intentar copiar su pantalla interactiva valiéndose de información confidencial.

Con este trasfondo y ante la imposibilidad de presentar la pantalla Synetech con la que ganó el concurso, Plexus ha pedido a la Xunta cambiarla por otra, algo que solo es aceptable si tiene la misma calidad o superior y requiere de un informe técnico favorable de Amtega. Es la propia agencia la que, a preguntas de este medio, confirma que «la empresa adjudicataria ha solicitado un cambio de muestras que, en conformidad con lo previsto en el ordenamiento jurídico, está siendo evaluada técnicamente con la finalidad de constatar su adecuación o inadecuación a los requisitos exigidos en los pliegos».

Amtega ve «ajeno» a la Xunta el conflicto judicial

La entidad que preside Mar Pereira no contempla que la querella contra Plexus pueda afectar a la agencia o al desarrollo del contrato, pues entiende que «tiene carácter privado y ajeno a esta Administración». La denuncia de Linux Tecnology acusa a Plexus y Sibucu de difundir información confidencial obtenida durante la preparación del concurso para intentar replicar su pantalla interactiva. Las dos empresas compostelanas habrían pasado a diversos fabricantes las características técnicas de la Pantalla Synetech L75SY en el intento de copiarla, revelando así información protegida de Linux Tecnology. La jueza Margarita Guillén investiga el caso por un posible delito de «descubrimiento de secretos».

La empresa denunciante advirtió en varios escritos a Amtega de la sustitución de la pantalla ganadora del concurso por otra. En el último, de finales de abril, recalcaba que «no existe ningún modelo superior ni ninguna causa de obsolescencia o cualquier otra actualización tecnológica que permita la actualización de la pantalla seleccionada y adjudicada». También pedía a la agencia especial cuidado con la información técnica trasladada por Plexus ante el riesgo de que fuese errónea.

Amtega aún no pidió las pantallas

El contrato de 15 millones que se adjudicó Plexus para el suministro de «kits de aula digital», es decir, las pantallas interactivas, es un acuerdo marco que debe desarrollarse con otros contratos derivados para la compra de la tecnología. Es decir, a partir del acuerdo de suministro, la Xunta ordenará la compra de las pantallas que necesite en cada momento. Según explicó Amtega a este medio, hasta el momento no se ha adjudicado ningún contrato derivado.