Peritos del Banco de España critican la “malísima praxis” de Caixanova
Los expertos dicen que la caja “rompió con toda la ortodoxia de las entidades de crédito” en la financiación de la ruinosa operación inmobiliaria de Rivas
Los peritos del Banco de España han acusado a la antigua cúpula de Caixanova de mala praxis bancaria en la financiación de una ruinosa operación inmobiliaria en Rivas (Madrid), que dejó un agujero de 41,8 millones en la caja del sur. Esta operación fue una de las siete remitidas por el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) a la Fiscalía Anticorrupción tras la nacionalización de Novagalicia.
El Ministerio Fiscal pide cuatro años de prisión por administración desleal para le expresidente Julio Fernández Gayoso, el ex director general José Luis Pego; su adjunto, Gregorio Gorriarán; y el exdirectivo Domingo González Mera.
Durante el juicio que se celebra en la Audiencia Nacional, los expertos del Banco de España insistieron en que la caja incurrió en una «no mala, sino malísima práctica bancaria» concediendo 1,7 millones de euros a sus deudores -que arrastraban problemas de impago- para que éstos hicieran frente a la devolución de los intereses del préstamo inicial, que quedaron cancelados.
La defensa de Caixanova
Una versión que han rechazado los peritos propuestos por las defensas, quienes han hecho hincapié en que la refinanciación «no es un delito, sino que es algo que no quedaba más remedio» hacer, en tanto que de haber reclamado dicha cuantía por la vía judicial se habría abocado a la compañía al concurso de acreedores, reduciendo aún más las posibilidades de recuperar el dinero.
Asimismo, han matizado que la entidad gallega nunca registró como entrada de capital esta operación, la cual, han dicho, quedó correctamente acreditada.
No obstante, los expertos del Banco de España han refrendado todos los extremos de su informe, incluido que no encontraron un soporte documental que acreditara tal modificación, y han ratificado que esta segunda hipoteca, aprobada a finales de marzo de 2010, «rompía con toda la ortodoxia de las entidades de crédito».
