Oleada de contratos en Vestas tras cerrar Viveiro: casi 2.000 nuevos megavatios en menos de un mes
La multinacional danesa se ha adjudicado contratos de 1.687 megavatios desde que anunció el cierre de la planta de Viveiro y eleva su cartera de pedidos a máximos históricos
Paradoja en Vestas. La multinacional danesa ha encadenado un aluvión de nuevos contratos mientras hace las maletas de Viveiro. La compañía ha reforzado su cartera de pedidos en 1.687 megavatios desde que anunció el cierre de su planta gallega gracias al reguero de encargos que ha recibido para la fabricación de aerogeneradores.
Y es que la firma que capitanea Henrik Andersen ha logrado adjudicarse contratos al calor de la instalación de nuevos parques eólicos en países como Francia, Italia, Brasil, Japón o Estados Unidos. Estos 1.687 megavatios se suman a los más de 48.000 que registraba la compañía al término del segundo trimestre del año, que constituían según el propio Andersen, el «máximo histórico» para la compañía.
La postura de Vestas: cierre o venta
Este reguero de nuevos encargos pasará, sin embargo, de largo por Viveiro, planta especializada en la fabricación de aerogeneradores para eólica terrestre de 2 megavatios y paneles de control para la turbina marina V164.
Dirección y comité de empresa han evidenciado sus desencuentros tras sus últimas reuniones. En ellas, los representantes de Vestas han dado portazo a la posibilidad de mantener la actividad en la planta incluso en el caso de recibir ayudas públicas, encaminando así a la factoría de Viveiro a dos opciones: o cierre definitivo o venta.
Es por ello que la plantilla ha exigido al Gobierno central y a la Xunta de Galicia «que se busque una solución para el mantenimiento de la totalidad de los puestos de trabajo», tal y como defendió el presidente del comité, David Mariño, al término de la reunión del jueves. El objetivo de los sindicatos es que las administraciones busquen «un inversor que se interese en adquirir la empresa y a sus empleados» ante un plan de recolocaciones que solo salvará un 8% de los empleos en Lugo.
Aunque la compañía ha expresado desde el primer momento su intención de recolocar a todos los trabajadores, tan solo algo más del 8% (una decena) podría quedarse en la planta lucense, en función de “una transformación de la actividad”. El resto, por el contrario, se verán obligados a hacer las maletas hacia otras fábricas de la multinacional en España.
Cuenta atrás por la negociación del ERE
Vestas, que ha visto cómo dos analistas clave (UBS y Goldman Sachs) reiteraban la semana pasada su recomendación de comprar acciones de la compañía pese a la rebaja del precio objetivo, enfila, de esta manera, su cuenta atrás en Viveiro en medio de la incertidumbre sobre cuál será el futuro de su factoría.
Está previsto que los sindicatos vuelvan a reunirse con la dirección de la empresa este viernes. El encuentro tendrá lugar apenas seis días antes de que el día 28 de octubre expire el periodo de negociación del ERE extintivo que la multinacional planteó para 115 trabajadores por la, a su juicio, baja demanda de aerogeneradores de dos megavatios.