Beneficios de 9 millones para Entrepinares, el quesero de Mercadona que disparó el precio de la leche

Queserías Entrepinares, uno de los históricos proveedores de Mercadona, cerró el ejercicio de 2021 con unas beneficios de 8,9 millones, una ligera caída respecto al año del Covid, cuando había registrado ganancias de 9,7 millones. El año después del estallido de la pandemia, cuando comenzó a acelerar la inflación, la compañía vallisoletana elevó su cifra de negocio hasta lograr unas ventas de 389 millones, casi 30 millones más que el ejercicio anterior y casi todas facturadas a la cadena de Juan Roig.

El crecimiento de los ingresos no tuvo reflejo en unos mayores beneficios por la escalada de costes. Entrepinares aumentó ligeramente el gasto de personal, pero de manera muy significativa los aprovisionamientos, que alcanzaron los 310,4 millones, 25 millones más que un año antes. En esta magnitud se incluyen las compras de leche, un elemento muy relevante para el campo gallego, el principal productor lácteo del Estado.

Entrepinares y Mercadona, en el campo gallego

Desde su planta de Vilalba, el fabricante de quesos batió récords hace solo unos meses en los contratos firmados con los ganaderos gallegos, que superaron por primera vez los 60 céntimos por litro. Entrepinares comunicó el incremento a los cerca de 200 ganaderos a los que compra leche en octubre, en un momento de tensión en la cadena de valor. La escasez de leche y el aumento de costes a causa de la inflación empujaba de forma natural hacia el alza de precios, pero Mercadona mantenía el brik de Hacendado por debajo de los 80 céntimos, provocando un efecto tapón en el resto de cadenas. Esta situación podía provocar un ahogamiento de la industria que acabase repercutiendo en las granjas.

La subida de Entrepinares coincidió con una de seis céntimos aplicada por Mercadona en su marca blanca, un movimiento que en las organizaciones agrarias de Galicia interpretaron como coordinado. No sería nada extraño, toda vez que la cadena de Juan Roig es el gran cliente de Entrepinares y que su relación viene de muchos años atrás, cuando el queso todavía se pagaba en pesetas.

El fabricante señala en sus cuentas anuales que tiene una concentración de su cifra de negocios en un sólo cliente,
Mercadona, con un importe de ventas muy significativo sobre el total del ejercicio. Esta situación de dependencia, en opinión de los administradores, no supone una amenaza a la continuidad de las operaciones porque Queserías Entrepinares es considerado como uno de los proveedores de mayor presencia en Mercadona, con una relación estable en el tiempo, basada en la confianza mutua y con voluntad de permanencia», añade. El primer contrato firmado entre las dos partes es de 1.999.

Sicavs, bodegas y 21 millones de beneficio

Con plantas en Vilalba, Valladolid y Fuenlabrada, Entrepinares acabó 2021 con 145 millones de patrimonio y 260 millones en activos. La empresa consolida en el grupo Ferrer y Barry, un holding que incorpora las plantas de transformación láctea, bodegas, empresas energéticas de respaldo a la actividad, empresas de servicios y dos sicavs, Lingus y Lian, que la familia Martín decidió disolver coincidiendo con el cerco a los mariachis.

Este holding cerró el ejercicio con 426 millones en ingresos y 21,5 millones de beneficios, frente a los 13 millones del año anterior. El 91% de la cifra de negocio procede de las ventas de queso, mientras que la venta de suero de leche fue la segunda fuente de ingresos con casi 33 millones. La plantilla a cierre de ejercicio superaba los 600 trabajadores.

En el sector lácteo gallego opera otro proveedor de marca blanca de Mercadona: Naturleite. Con planta en Meira, pertenece a Covap, el grupo de base cooperativa que está detrás de la leche Hacendado. La filial gallega factura unos 60 millones anuales.