Nueva venta de Alcoa en plena crisis de San Cibrao: saca 200 millones por una antigua planta desmantelada
La multinacional norteamericana vende terrenos y los activos industriales vinculados a una fundición en Texas que cerró completamente en 2017 y presume del valor generado en la zona
Alcoa hace caja. Esta vez no como una estrategia de reducción de capacidad, espada de Damocles que ha pendido sobre las plantas españolas de la multinacional y que ha acabado cayendo sobre cada una de ellas con excepción de la factoría de alúmina de Lugo; pero sí con una nueva venta que tiene un inevitable contraste con la situación que atraviesa la fábrica de aluminio de San Cibrao.
En tierras gallegas la compañía planteó un ERE para más de 500 personas que tumbaron los tribunales y entabló un proceso de diálogo de meses con el Gobierno y con potenciales compradores de las instalaciones que acabó en nada. En este escenario, con una huelga que impide sacar la producción y con los precios de la energía disparados, Alcoa ha sacado más de 200 millones de euros vendiendo los activos industriales y los terrenos asociados a una antigua fundición que decidió cerrar.
Carbón, aluminio y trabajos de restauración para Alcoa
La multinacional con sede en Pittsburgh anunció este lunes que culminó la venta de su antiguo emplazamiento industrial en Rockdale, en Texas, por 240 millones de dólares (unos 206 millones de euros). La operación incluye el traspaso de unas 15.545 hectáreas de terreno, fundamentalmente pastos y propiedades agrícolas, además de las instalaciones industriales de su antigua factoría, que se cerró completamente en 2017. El comprador es un grupo de inversión inmobiliaria con sede en Texas y, aunque Alcoa no ha desvelado más sobre su identidad, todo apunta a que podría ser Xebec, una empresa de gestión de inversiones con sede en ese Estado.
El grupo norteamericano, de nuevo en contraste con lo que sucede en Galicia, dijo que la venta demuestra el valor que son capaces de desbloquear mientras restauran los terrenos afectados por su actividad. «Estamos seguros de que el trabajo que realizamos para preparar los terrenos para esta transacción traerá beneficios significativos a la comunidad anfitriona y a las áreas que rodean Rockdale”, señaló en un comunicado uno de los vicepresidentes de Alcoa, Rob Bear.
Una fundición de Alcoa para Amazon
Hace referencia al trabajo de recuperación de la zona, que además de contar con la fundición tenía actividad minera para la extracción de carbón. La restauración consistió en dotar el espacio con tierras de cultivo y generar un lago. “Desde el cierre de Rockdale, hemos cumplido con nuestros compromisos y atraído a numerosos inquilinos que están ayudando a crear oportunidades de desarrollo económico”, dice la multinacional.
En su momento se especuló con que Amazon pudiera instalar en esa zona una nueva sede del grupo y también de una empresa francesa que propuso construir una granja con un millón de paneles solares desplegados por el terreno.
En cualquier caso, no es la primera venta que realiza Alcoa en medio de la tormenta por el futuro de San Cibrao y tras el pinchazo en el traspaso de las plantas de Avilés y A Coruña al fondo suizo Parter y que ahora están inmersas en un proceso judicial por el posible saqueo de sus fondos. En junio anunció la venta por 100 millones de dólares de terrenos en Maryland, donde se ubicaba la fundición de Eastalco que clausuró en 2010.