Novavax: la vacuna de Zendal pierde un 60% de su valor en bolsa en el año
La cotización de la farmacéutica americana, cuyo antígeno contra el Covid llegó hace unas semanas a España, se derrumba debido a que sigue sin recibir luz verde del regulador de EEUU
Vista del departamento de producción de Biofabri, del grupo Zendal, que prevé fabricar «cientos de millones» de dosis de la vacuna de la Covid-19 en la que trabaja la farmacéutica estadounidense Novavax, con la que cerró un acuerdo para producirla en la Unión Europea.- EFE/Salvador Sas
Novavax, una de las grandes farmacéuticas del Covid, vive su particular vía crucis en el Nasdaq americano. La acción cotiza en estos momentos en torno a los 60 dólares. En lo que va de año, ha retrocedido un 60%. Los analistas sostienen que el derrumbe se debe al hecho de que su vacuna contra el coronavirus aún no ha sido aprobada por la FDA, el regulador americano de medicamentos.
En 2020, la farmacéutica con sede en Maryland logró un notable reconocimiento en España en general y Galicia en particular debido a que firmó un acuerdo con Zendal, el grupo de Pedro Fernández Puentes (también vicepresidente de Pharma Mar) para que su filial Biofabri produzca el antígeno de su vacuna para el mercado comunitario europeo.
A finales del pasado diciembre, la Comisión Europea concedió la autorización condicional de comercialización para la vacuna de Novavax. El Gobierno español adquirió 2,2 millones de viales, cantidad que se podía ampliar hasta los 10. Es la quinta vacuna contra el coronavirus que se inocula en el país y la primera que utiliza una plataforma basada en proteínas recombinantes (como la vacuna española de Hipra).
El batacazo de un chicharro que creció en pandemia
Novavax atraviesa un momento complicado en la bolsa americana, aunque su evolución hay que mirarla en perspectiva. Hay que tener en cuenta que en febrero de 2021, después de conocerse los buenos resultados de los ensayos de su vacuna contra el Covid, la acción se disparó hasta los 320 dólares. Sin embargo, un año antes, cuando irrumpió la pandemia, el grupo farmacéutica era considerado un chicharro en toda regla. A mediados de marzo de 2020, cuando comenzaron los confinamientos en medio mundo, la acción no llegaba a los siete dólares.
El handicap del mercado americano lastra su cotización. Su retroceso es muchísimo más pronunciado que el de otras de las farmacéuticas del Covid, que vieron cómo sus acciones repuntaban con la pandemia y atraviesan en estos momentos ciertos retroceso debido a que los inversores dan por amortizado ya parte de sus logros, con el avance de la inmunización.
Basten dos ejemplos: Moderna cerró en el Nasdaq el pasado viernes con el título a 160,84 dólares. El 31 de diciembre del pasado año, se intercambiaba a 253 dólares. Su cotización ha caído un 36% en lo que va de año. En el caso del gigante Pfizer, el precio de la acción ha retrocedido un 5% este 2022.
A la espera de beneficios (millonarios)
Debido precisamente a los retrasos en la aprobación de la vacuna por dificultades logísticas y de producción, Novavax volvió a cerrar el ejercicio 2021 en pérdidas. Fueron unos abultadísimos números rojos de 1.744 millones de dólares, sobre los 418 millones que perdió el año antes. No obstante, debido a sus contratos de comercialización, el consenso del mercado prevé que podría finalizar el ejercicio en curso con ganancias, esta vez sí, de 1.800 millones.
Dejando a un lado Novavax y su cotización, el grupo Zendal continúa cerrando hitos más allá de lo que tiene que ver con la lucha contra el Covid. Recientemente anunció que, también a través de Biofabri, exportará su vacuna contra la tuberculosis a más de 70 países del sudeste asiático y África.
