Navantia invierte 50 millones en adaptar el astillero de Fene para liderar la eólica offshore
La empresa naval pública transformará las instalaciones para consolidarse como un proveedor de referencia ante la creciente demanda en el sector de las cimentaciones para la eólica marina
Navantia invertirá más de 50 millones hasta el 2030 para transformar su astillero de Fene (A Coruña) y adaptarlo a la «creciente demanda» en el sector de las cimentaciones para eólica marina. El plan, que será ejecutado por su división de energías verdes –Navantia Seanergies– permitirá adaptar las nuevas instalaciones a las necesidades del mercado futuro.
La compañía espera un aumento del volumen de negocio y del empleo que permitirá «dar cabida a proyectos más grandes, a un mayor número de unidades y a un incremento de la productividad».
Una parte de la inversión ha comenzado ya con la fábrica de monopiles, según informan desde la firma pública, que actualmente está en construcción y que se inaugurará a principios del próximo año.
«El centro, único en Europa capaz de producir las tres tecnologías existentes de plataforma para parques eólicos marinos, podrá así acometer proyectos de estas tecnologías al mismo tiempo», ha destacado, en alusión a la ejecución de jackets, monopiles y estructuras flotantes.
Proveedor de referencia en la eólica marina
La empresa ha considerado que el objetivo es «consolidarse como un proveedor de referencia para la eólica marina», consolidar su «relación con socios colaboradores y conseguir nuevos clientes tanto nacionales como internacionales».
Para Navantia, la transformación de la planta gallega contempla como «actuaciones estratégicas» la adecuación de su taller de bloques planes, que pasará a dedicarse a fabricar monopiles XXL, y la conversión de las zonas de trabajo situadas bajo pórtico, «una inversión crítica para los planes de Navantia Seanergies«.
Así, ha valorado que la fábrica de monopiles XXL tendrá «dos líneas simultáneas de producción de alta eficiencia» y ha indicado que la «adaptación de las gradas permitirá anticiparse a las nuevas necesidades del negocio, incrementando notablemente la capacidad de producción».
«Será el paso definitivo y necesario para adaptar las necesidades del astillero a la eólica flotante, permitiendo a su vez acometer proyectos de jackets y realizar descargas de piezas de gran peso directamente sobre las líneas de producción», ha remarcado.
Finalmente, ha avanzado que se construirá una sede del Centro de Excelencia de Energías Verdes junto a las nuevas oficinas del recinto, unas dependencias que se dedicarán «a la innovación y desarrollo de la cadena de valor de la energía eólica marina, el hidrógeno y energías del mar»