Mensaje de los fondos de Celsa a la plantilla de A Laracha: “No habrá cierres ni deslocalizaciones”
Los acreedores critican la “desastrosa” gestión financiera de la siderúrgica y defienden su plan de reestructuración para hacer viable a la compañía a corto y medio plazo
Los fondos acreedores de Celsa han señalado este jueves que su plan de reestructuración de la compañía “no incluye ni cierres de plantas ni deslocalizaciones”. Así lo han señalado en un comunicado en el que han subrayado que el proceso judicial que arrancó el pasado lunes en Barcelona «hay que valorar si el plan de reestructuración que presentan los acreedores hace viable a la compañía a corto y medio plazo, y si este es mejor que la única alternativa posible, que es la insolvencia».
Tal y como avanzó Economía Digital Galicia, uno de los principales temores de los trabajadores de la factoría de Celsa en la comunidad, que depende de la filial Celsa Atlantic, es que “termine como Alu Ibérica” ya que desconocían, tal y como apuntaron fuentes sindicales, si el plan industrial o de viabilidad de los fondos contempla la posibilidad de mantener los puestos de trabajo.
Desastre de gestión financiera
Los fondos se hacen también eco de diversos aspectos de la declaración de ayer ante el juzgado mercantil número 2 de Barcelona de su asesor financiero, la firma Houlihan Lokey, cuyo socio Manuel Martínez-Fidalgo dijo ayer que los activos de este grupo siderúrgico «no son suficientes para pagar los pasivos» que acumula la compañía y tildó de desastre la gestión financiera de Celsa en los últimos años.
En la sesión de este jueves en el juicio que debe dirimir si la familia Rubiralta mantiene o no el control accionarial de Celsa han comparecido como testigos diversos expertos aportados por los accionistas actuales de la siderúrgica, que han avalado la solvencia de la compañía y la verosimilitud de sus planes de negocio para los próximos años.