Medio millar de motos recorren a Mariña para protestar por la crisis de Alcoa
Unos 500 motoristas se han concentrado frente a la Praza dos Campos de San Cibrao para criticar la falta de implicación de la SEPI para resolver la crisis de Alcoa
Varios hombres participan en una caravana motera por el futuro de la planta de Alcoa de San Cibrao – Carlos Castro
Nueva manifestación multitudinaria en A Mariña Lucense contra el cierre de Alcoa. Unos 500 motoristas han protagonizado una marcha de dos horas por la comarca para terminar en la Praza dos Campos de San Cibrao, donde han quemado simbólicamente una moto con la palabra SEPI para protestar por la falta de implicación de la sociedad estatal en la crisis de la factoría de aluminio.
En la caravana han participado varios clubes de motos de toda Galicia y también de Asturias, y ha estado apoyada, además, por diversas asociaciones de hosteleros y comerciantes de la zona. En declaraciones a Europa Press, el presidente del comité de empresa de Alcoa, José Antonio Zan, ha destacado la «muy buena» acogida de la concentración, no sólo por parte de los participantes, sino también de los propios vecinos.
Estas movilizaciones se producen apenas cuatro días después de la huelga general convocada este miércoles para reclamar «futuro» frente a la crisis industrial que se visualiza en los conflictos de Alcoa y Vestas. El seguimiento fue amplio, con paradas de actividad en polígonos, comercios, hostelería y colegios e institutos, entre otros centros de trabajo.
Maroto se defiende
Muchas de las críticas, tanto del comité de empresa como de la Xunta, se han dirigido a la ministra Maroto, que este domingo ha defendido en una entrevista concedida a Cadena Ser y recogida por Europa Press el proceder del Ejecutivo y ha instado además a Alcoa, «única responsable» de la situación, a «abandonar» A Mariña.
«Llevamos interviniendo desde el inicio del proceso buscando soluciones. También personándonos en una causa que ganamos y que permitió restituir los derechos de los trabajadores y evitar que parasen las cubas», ha recordado la ministra. «La solución es que se vayan, que vendan la planta. Ahí van a encontrar al Gobierno«, ha insistido Maroto, que ha recalcado que Alcoa debe «dar un paso atrás» y devolver las «muchas ayudas que ha recibido», concretamente las subvenciones de los últimos tres años, «un dinero público mal utilizado».
Maroto ha confirmado además que el plazo concedido a la empresa para encontrar una solución termina en diciembre y ha defendido el potencial que todavía presenta la industria y la comarca, que «necesita inversión», pero que cuenta con una situación y un contexto privilegiados.
La ministra de Industria también ha criticado la actitud mostrada durante esta última semana por algunos dirigentes del PP, «animando a una huelga general contra el Gobierno, con una actitud siempre de confrontación y utilizando de forma partidista la inquietud de los trabajadores para colocar al Ejecutivo como el problema». Además, ha censurado la «pasividad» de la Xunta.
