Los parques eólicos autorizados para Alcoa solo garantizan la mitad de la energía que necesita
Alcoa destaca en su última memoria que durante el primer trimestre del año “las autoridades denegaron algunos permisos con el desarrollo de parques incluidos en los acuerdos de compra de energía a largo plazo”
Alcoa necesita precios energéticos más competitivos para que la fundición de aluminio primario de San Cibrao sea competitiva en su reinicio, que comenzará el 2024 pero no concluirá hasta alcanzar el pleno funcionamiento de la planta en 2025. La idea de los de Pittsburgh es lograrlo mediante contratos de energía a medio y largo plazo, los PPA´s, vinculados a la construcción de nuevos parques eólicos. Pero para eso, los complejos deben pasar los filtros de las administraciones (estatal o autonómica dependiendo de la capacidad) y estar construidos a tiempo.
En plena época de tramitaciones exprés de complejos vinculados a grandes proyectos industriales en la comunidad, el grupo explica que durante el primer trimestre del año “las autoridades pertinentes denegaron algunos permisos relacionados con el desarrollo de parques incluidos en dos acuerdos de PPA firmados en 2022 con proveedores de energía renovable.
Parques y energía
Así, al momento de formular esas cuentas trimestrales, el grupo aluminero indicaba que la cantidad de energía garantizada con los contratos firmados de PPA se rebajaba de un 75% a la mitad de la que necesita la fundición. “Como resultado, ahora se espera que esos PPA suministren hasta el 50% de las futuras necesidades de energía de la fundición a su máxima capacidad”, apuntan. Durante el pasado año, Alcoa llegó a firmar acuerdos definitivos de contratos renovables con Endesa y con Greenalia. “La compañía continúa negociando con otros proveedores para asegurar las necesidades restantes de suministro de energía para la fundición”, apunta.
A finales de enero, tanto la Xunta como el Ministerio para la Transición Ecológica otorgaron declaraciones de impacto ambiental (DIA) favorables a trece proyectos de parques eólicos vinculados a Alcoa. La administración gallega, con competencias en los proyectos de menos de 50 megavatios, aprobó ocho gallegos. Los de Teresa Ribera, por su parque, dieron luz verde a otros cinco proyectos vinculados a los acuerdos entre Alcoa y Endesa.
Pérdidas
Como corporación, a nivel mundial Alcoa se anotó, entre enero y marzo, unas pérdidas de 231 millones de dólares, unos 211 millones de euros al cambio, unas cifras que contrastan con las ganancias de 469 millones conseguidas durante el mismo periodo del pasado ejercicio. La caída se debe, entre otros factores, a un retroceso en los ingresos de casi un 20% motivado por los recortes de producción en la mitad de sus plantas.
De hecho, de las 17 con las que cuenta entre Europa, América del Norte, Sudamérica y Oceanía, un total de ocho operan por debajo de su capacidad para lidiar con las crecientes facturas tanto energéticas como de suministros.