Los números de Cortizo, Exlabesa y Extrugasa… El aluminio gallego sí es rentable
Los tres principales grupos transformadores de aluminio en Galicia cerraron con beneficios el año del Covid-19 y tienen en marcha inversiones millonarias mientras su proveedora Alcoa activa un parón de dos años
Cara y cruz para los fabricantes del sector del aluminio en Galicia. Alcoa ha activado un parón de dos años en su planta de San Cibrao y su antigua factoría de A Coruña (la de Alu Ibérica) selló la entrada en concurso de acreedores el mes pasado. Pero las crisis de las dos fábricas para la producción de aluminio primario en Galicia contrasta con el ritmo de crucero de los tres principales representantes de la industria transformadora del aluminio en suelo gallego: Cortizo, Exlabesa y Extrugasa.
Y es que las tres compañías han logrado mantener sus beneficios millonarios pese al golpe del Covid-19 y, además, todas ellas han activado inversiones para modernizar y ganar capacidad productiva en sus instalaciones.
Cortizo bate récords de facturación y beneficios
Aluminios Cortizo, asentada en Padrón, llevó su facturación a máximos históricos en el año del Covid-19. En concreto, el grupo logró estirar su cifra de negocio desde los 636 millones de euros que registró en 2019 hasta los 701 millones en 2020, según desvela la firma en su página web. Además, su holding, Cortizo Cartera, disparó sus beneficios desde los 49,9 millones de euros hasta los 58,8 millones.
El grupo ha logrado llevar su cuenta de resultados hasta máximos históricos en un año marcado por el estallido de la pandemia, después de sacar provecho de sus señas de identidad. «Grupo Cortizo se distingue de la gran mayoría de sus competidores
gracias a que tiene la capacidad de completar internamente el ciclo integral de producción del aluminio, asegurando la calidad de los medios y elementos empleados a lo largo de todo el proceso. Los procesos de fundición, extrusión, lacado, anodizado, brillo químico y mecanizado se realizan en sus propios centros productivos«, apunta la firma en su último informe de gestión.
«Otro aspecto relevante es la capacidad de personalizar la logística del embalaje y del transporte, punto que también nos diferencia de nuestros competidores. Todo lo comentado posibilita hacer llegar el producto final al cliente con total solvencia e inmediatez», añaden desde el grupo con sede en Padrón.
Exlabesa resiste con casi ocho millones de beneficios
Este crecimiento en ingresos y beneficios no ha podido ser replicado por la segunda mayor firma del sector en Galicia (Exlabesa), que, no obstante, ha logrado capear la crisis del Covid-19 con un beneficio de 7,9 millones de euros a través de su principal sociedad en España: Exlabesa Extrusión Padrón. La cifra es ligeramente inferior a los 8,4 millones de euros que ganó en un 2019 en el que también logró facturar más (127,9 millones de euros frente a los 116,1 millones de 2020).
Desde la compañía con centros de producción en Valga y Padrón aluden, al igual que Aluminios Cortizo, a la fluctuación del «precio del aluminio» como el «principal riesgo de mercado de la sociedad» de cara al recién finalizado ejercicio 2020. Su condición de compradoras de aluminio para su posterior transformación (en este caso, extrusión) perjudica a ambas compañías ante subidas en el precio de esta materia prima como la registrada en 2021, que arrancó en el entorno de los 2.000 dólares la tonelada y escaló hasta por encima de los 3.000 para cerrar el ejercicio por encima de los 2.600.
Extrugasa vende manos, pero gana más
Extrugasa, la tercera en discordia del sector en Galicia, vio recortada su facturación desde los 110,6 millones de euros hasta los 101,1 millones, algo que, sin embargo, no le impidió dar un nuevo empujón a sus beneficios. Gestión Corporativa Quinta, sociedad dominante del grupo, culminó 2020 con unas ganancias por valor de 6,29 millones de euros, frente a los 6,14 millones obtenidos en 2019.
Los administradores de la compañía apuntaban en su informe de gestión la «multitud de vías de desarrollo y negocio” del sector del aluminio, algo que a su juicio, incrementaba la necesidad “de realizar inversiones a final de atender a la cada vez mayor demanda”.
Inversiones millonarias en marcha
En esta línea se enmarca el proyecto de Extrugasa para ampliar sus instalaciones. El grupo anunció el pasado mes de febrero su interés por hacerse con 36.000 metros cuadrados de suelo industrial en el polígono industrial de A Ran, ubicado en el concello de Cuntis.
Allí preveía invertir 15 millones de euros una vez que el Concello de Cuntis elaborase el plan de ampliación de este polígono. Se trata de un proyecto de expansión y ampliación de capacidad productiva que también tiene continuidad en Exlabesa y Cortizo.
La primera tramitó la pasada primavera ante la Xunta de Galicia la instalación de una nueva línea de extrusión en su planta de Rois (Padrón). Su objetivo pasaba por ganar capacidad de producción, un movimiento que, además, elevaría de 9.550 a 12.000 toneladas su consumo anual de tochos de aluminio.
La segunda, por su parte, tiene 55 millones de euros en inversiones en marcha. La última en activarse ha sido la de 4,4 millones de euros que dedicará a su planta de Manzanares (Ciudad Real) y para la que el Ministerio de Hacienda ha autorizado al Gobierno castellanomanchego a conceder una subvención de 524.580 euros.
A esta inversión se suma la de 41 millones de euros que la firma anunció el año pasado para su planta del polígono de Picusa (Padrón), en la que generarán 130 nuevos empleos, a los que se sumarán los otros diez que se crearán en la nueva planta de reciclaje de PVC en el polígono de Pazos (también en Padrón), a la que destinará otros diez millones de euros en inversiones.