Los hosteleros de Lugo dan por superada la crisis del Covid-19 tras un verano «positivo»
El presidente de la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería e Turismo de Lugo asegura que el sector ha llegado a "cifras prepandemia" en verano y que los hoteles de la ciudad lucense rozaron el 80% de ocupación
Los hosteleros lucenses dan por cerrada la crisis del Covid-19. El presidente de la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería e Turismo de Lugo (APEHL), Cheché Real, ha asegurado que el sector ha regresado a «cifras prepandemia» tras un verano que se ha saldado con un balance «positivo».
Según Cheché Real, los hoteles en Lugo rozaron el 80% de su ocupación «algo que no se veía desde el 2018/2017» y esperan con buena perspectiva que septiembre sea un mes atractivo para el visitante. A juicio del presidente de APEHL, septiembre siempre «colea» y siguen apareciendo en la provincia de Lugo algunos turistas dispuestos a «disfrutar del ocio y la gastronomía» aunque con matices.
«Pese a que en septiembre siempre hay visitantes, es cierto que depende mucho del tiempo que haga. Si llueve, la afluencia baja. Otro año pediríamos buen tiempo, pero después de todos los problemas con la sequía sabemos que el agua es necesaria», ha admitido. Según sus cálculos, la ocupación hotelera en este noveno mes del año estará entre el 50% y el 60%, cifras que les hacen abrazar con «optimismo» el cierre de temporada.
La crisis por la energía
El presidente de la APEHL ha pasado revista también a la crisis energética. «El gas ha subido, el petróleo ha subido y esto lo que provoca es que los costes se disparen y también repercuta en los precios porque, evidentemente, una empresa no se puede sostener a base de pérdidas», ha advertido.
No obstante, Cheche Real quiere destacar que, pese a este incremento de los costes, el precio del producto, de las cartas y los menús «no suben en el mismo porcentaje», por lo que pone en valor el «esfuerzo» de la hostelería lucense para cuidarla y adaptarla a las necesidades y demandas del cliente.
Tras la pandemia y los cierres obligados por las restricciones en los últimos dos años, Real reconoce que «hubo casos en los que no se pudieron soportar y cerraron», pero por lo general «el sector está sabiendo reinventarse y hacer frente a las todas las crisis, la de la energía ahora y la sanitaria antes».