Los Fernández Somoza abroncan al anterior dueño de TDN
Las hijas del antiguo dueño de Azkar aseguran que la mala gestión llevó a TDN a una situación crítica y reformulan las cuentas del anterior propietario
El desembarco del grupo de Luis Fernández Somoza en la empresa de transporte TDN implica algo más que un cambio de propiedad y un rescate de cerca de 40 millones para las delicadas finanzas de la firma de paquetería industrial. Las hijas del que fuera dueño de Azkar, Susana y Belén Fernández Paradela, han dado un vuelco al funcionamiento de la empresa desde su nombramiento como administradoras solidarias el 20 de octubre del año pasado.
Si bien los números rojos acumulados por TDN, 11,5 millones en pérdidas en 2017 y más de 17 millones en 2016, ya hacían pensar que algún cambio era necesario, los nuevos dueños afirman con rotundidad que tantos agujeros en el balance se deben a la deficiente gestión de quien los precedió en el cargo.
La deficiente gestión
El informe de gestión de TDN, firmado por las dos administradoras, señala al anterior propietario Carlos Aremayo, quien controlaba la empresa desde 2010 a través de la sociedad Cafrayo y cuya participación acabó laminada por las ampliaciones de capital que necesitó la firma y por la reciente operación acordeón para sanear las cuentas.
Susana y Belén Fernández Paradela aseguran que el estado contable de TDN “es el de una compañía que durante los últimos seis ejercicios no ha sabido gestionar sus recursos para adaptarse al entorno, que ha desatendido los principios básicos de una correcta gestión empresarial y que ha abocado a la empresa a una situación de desequilibrio patrimonial”.
Cambio en la política comercial y en los departamentos “clave”
El documento añade que “no ha existido tiempo material suficiente para influir de forma decisiva en los resultados” y que las dos ampliaciones de capital efectuadas en diciembre no fueron suficiente para corregir el desequilibrio financiero, pese a suponer una aportación de fondos de 18,5 millones. Este motivo fue el que empujó al brazo inversor de Fernández Somoza, Carteson, a ejecutar este octubre una operación acordeón, como explicó este medio.
Tan deficiente veían la gestión de Aremayo las nuevas administradoras que practicaron “cambios en los departamentos clave de la empresa” y corrigieron “aquellos procesos que se detectaron improductivos o incluso perjudiciales para la compañía”. “Se ha modificado la política comercial y mejorado el servicio al cliente, de manera que, durante los primeros meses del ejercicio 2018 se han registrado ya incrementos en la cifra de ventas superiores al 25%”, añaden.
Reformulación de cuentas
Adicionalmente, también reformularon la cuenta de resultados que dejó el antiguo dueño, pues entendían que «no reflejaba la realidad de la empresa». La reexpresión de los números conllevó cambios hasta en 16 partidas del balance.
Aremayo tomó las riendas de TDN en 2010 coincidiendo con la salida del histórico consejero delegado de la firma, Manuel Álvarez, y la fusión con Lodis (Transportes Dilocal), una empresa de su propiedad. Según informó el medio especializado Cadena de Suministro, fue uno de los fundadores de TDN en 1983 junto a Luis Fernández Somoza y Gustavo Prieto, el ex director general fallecido en mayo de 2017.