Los balnearios gallegos se enfrentan a Turespaña
Aseguran que se favorece únicamente la promoción de las termas de Ourense
Durante años, el termalismo gallego fue uno de los principales reclamos turísticos de la comunidad. Sin embargo, como a la mayoría de los sectores, la crisis les ha afectado considerablemente, principalmente porque el turista termal es español. Ante esta situación, la Asociación de Balnearios de Galicia pide un mayor apoyo institucional ya que, sostienen que, la mayoría de las promociones que se hacen del sector se centran exclusivamente en promocionar el termalismo de Ourense, dejando a un lado el del resto de Galicia.
“La imagen exterior que damos del termalismo gallego se únicamente en Ourense, y realmente no tiene nada que ver con lo que se hace en los balnearios. Sin embargo, el termalismo ourensano siempre recibe muchas ayudas de Turespaña a las que nosotros no accedemos”, sostiene Benigno Amor, gerente de la Asociación de Balnearios de Galicia. Amor sostiene que en las últimas fechas, las actividades termales de la ciudad de Ourense han contado con una importante inyección publicitaria de la Sociedad Estatal para la Gestión de la Innovación y las Tecnologías Turísticas (Segittur). “Si el resto de establecimientos también tuviéramos acceso a estas ayudas de promoción, la situación sería distinta”, indica.
A pesar de todo, indican que las relaciones son buenas con Turgalicia, dependiente de la Xunta y que, incluso, este organismo los ha ayudado a participar en una feira de promoción termal en París, que se celebrará en las próximas semanas.
Cierres durante el invierno
No es la primera vez que los balnearios gallegos cargan contra el modelo termalista de Ourense. En junio, la Asociación de Balnearios de Galicia ya los acusó de “competencia desleal” ya que, defendían que el modelo termalista que vendían “es importado”.
Además de estos conflictos, Amor indicó a Economía Digital que, al igual que ya está pasando en el sector de las casas rurales, varios balnearios gallegos han decidido alargar la época en la que echan el cierre a sus negocios durante el invierno para evitar mayores pérdidas.
A la caza del turista internacional
“Ahora, lo fundamental para los balnearios es centrarnos en el turismo de salud y en poder atraer al turista internacional, algo que es muy complicado a corto y medio plazo”, explica Amor. De momento, tienen los ojos puestos en el próximo puente de la Constitución, ya que aseguran que las previsiones son de una alta ocupación.