Liquidación de Arias Infraestructuras: dos expropietarios emergen entre los grandes acreedores
Abeirar, que vendió la constructora en 2018 y mantenía créditos participativos, y el expresidente de la patronal Antón Arias Díaz-Eimil, entre los acreedores en la fase de liquidación que también se dirime en los juzgados
La apertura de la fase de liquidación de Arias Infraestructuras que en breve decretará el Juzgado de lo Mercantil número dos de A Coruña sentará en la misma mesa a dos de los anteriores propietarios de la constructora coruñesa. Lo harán en calidad de acreedores. Y todo ello una vez que la compañía no ha logrado salvar su plan en la junta de este miércoles tras la negativa de Hacienda a adherirse a la reestructuración planteada, que incluía una quita del 45% de la deuda, lo que han frustrado la salida del concurso de la constructora.
Arias Infraestructuras, en su día Arias Hermanos, va a la liquidación tras un proceso concursal rápido, que se activó en marzo de este año, y después de los infructuosos intentos de los dos socios que pilotaban la constructora, Mario Barcenilla y Antonio Aranzadi, por recuperar la calificación para poder concurrir a concursos de obra pública, lo que terminó por cortocircuitar todo atisbo de salvación que ahora la Agencia Tributaria viene enterrar definitivamente.
Doscientos acreedores, pequeños y grandes
La compañía coruñesa llega a la fase de liquidación con unos créditos concursales reconocidos de 12,9 millones de euros. Del total, 10,3 millones son créditos ordinarios, básicamente deuda bancaria, y 1,7 millones corresponden a subordinados. Abanca, Santander y, en menor medida BBVA, figuran en la lista de acreedores, así como ayuntamientos, diputaciones y proveedores, pero con importes bajos.
En total, son más de 200 acreedores los que están convocados en este proceso con deuda reconocida, y entre ellos emergen dos expropietarios de Arias Infraestructuras, que además fueron socios y en su día acabaron en los juzgados con cruces de querellas por administración desleal.
Según la lista de acreedores, cuya última modificación data de principios de septiembre y solo afecta a unos 400.000 euros, figuran con deuda reconocida la sociedad Abeirar 2005 y, no reconocida pero reclamada judicialmente en otra instancia judicial, el expresidente de la patronal Antón Arias y Díaz-Eimil, miembro de la familia fundadora y uno de los ejecutivos históricos de Arias.
De Abeirar a Antón Arias
Abeirar 2005 fue la última sociedad propietaria de Arias hasta su venta a Barcenilla y Aranzadi. Fue en julio de 2018 cuando el entonces dueño de Arias Infraestructuras, Ildefonso Rodríguez Iglesias, acordaba la venta de la compañía constructora coruñesa a los dos antiguos ejecutivos de Isolux. Abeirar era la sociedad holding de Rodríguez Iglesias, fallecido en mayo de 2019, y ahora está gestionada por su viuda e hijos.
En el proceso concursal Abeirar 2005 solicitaba al juzgado que se le reconociesen 1,4 millones de deuda, básicamente financiera y relacionada con los créditos participativos que en su día concedió a los compradores de Arias para materializar la operación de compra. Finalmente, en la lista definitiva a Abeirar se le reconoce un millón de euros.
Para Antón Arias Díaz-Eimil, otro de los acreedores, el proceso es diferente. Solicitaba que le reconociesen una deuda de 664.000 euros, que tiene carácter litigioso y así se consideró y figura en la lista. Su demanda se desestimó por sentencia del Juzgado de Instrucción número uno de A Coruña en abril de este año, pero no adquirió firmeza. Esa es una de las observaciones que a esta reclamación figura en la lista definitiva de acreedores.