Límites a los precios: Yolanda Díaz y Mercadona tienen en vilo al sector lácteo
La propuesta de Yolanda Díaz para limitar los precios de los productos básicos llega con la cadena de valor del lácteo tensionada por la escalada de costes y la caída de producción
La vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, se verá este jueves con Carrefour en el comienzo de una serie de reuniones con las cadenas de distribución alimentaria para abordar las subidas de precios de los productos en el actual contexto de inflación. La propuesta de la dirigente gallega es pactar con las empresas unos límites a este encarecimiento, de tal manera que puedan garantizar que una lista de productos básicos se mantendrán a precios asequibles para el consumidor. No hay más concreción por el momento en el plan de la ministra de Trabajo, que el lunes estará con las patronales de la distribución y las grandes superficies y con las asociaciones de consumidores. La medida, en todo caso, no supondría una intervención en los precios, según manifestó la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, por lo que dependería de la voluntad de las propias empresas para llevarla a cabo.
Esta propuesta llega en un momento de tensiones en la cadena de valor por la dificultad de trasladar el incremento de costes al consumidor. Los pescadores se pronunciaron este miércoles contra la idea de topar los precios y demandaron rebajas de impuestos, concretamente, pasar el IVA del pescado al tipo súper reducido en lugar de «afectar a la libertad de mercado y de competencia que existe en España», en palabras de Cepesca. También la Asociación Agraria de Galicia, entidad que se nutrió de antiguos componentes de la quebrada Xóvenes Agricultores, censuró la propuesta y aprovechó para criticar al Gobierno.
El frágil equilibrio del sector lácteo
No se pronunciaron, por el momento, las principales asociaciones de productores del sector lácteo, un mercado que acumula tensiones, sobre todo por el lado de la industria. La escalada de precios que se produjo durante el primer semestre del año, después de las movilizaciones de 2021, se sumó a una caída de la producción. Muchos ganaderos optaron por el sacrificio de las vacas mayores para vender su carne en busca de mayor rentabilidad, lo que restó litros a las granjas. La caída en las entregas, de un 5% en España y un 3% en Galicia en julio, se replica en otros países productores como Francia o Alemania. Dicho de otra manera, hay escasez de leche en el mercado.
La lógica dicta que la inflación y la menor disponibilidad de producto debe empujar los precios al alza. Así ha sido hasta julio. Según los últimos datos del Ministerio de Agricultura, en el séptimo mes del año se alcanzaron los 44,7 céntimos por litro, frente a los 43 que se pagaban en Galicia el mes anterior. Sin embargo, este equilibrio depende de que la distribución pueda repercutir los precios en los lineales para no ahogar a la industria.
La posición que adopte Mercadona será clave por su elevada cuota de mercado en España. No solo debido a la leche que adquiere para la marca blanca Hacendado, que ya es una de las más consumidas en el Estado, sino también por la influencia de su política de precios en otras cadenas competidoras. En el sector esperaban una subida en el brick de leche por parte del grupo de Juan Roig de cara a este septiembre que, por el momento, no se ha producido. Aún así, las marcas blancas alcanzaron precios elevados, incluso por encima de los 80 céntimos el litro, lo que dio oxígeno a la cadena de valor hasta los últimos meses.
Las mayores dificultades las sufre la industria. El contexto inflacionista hace que los pagos a las granjas sean dispares y con menor estabilidad, pues el aumento de costes desborda los contratos anuales. Algunas, como Lactalis o Celta, han optado por revisar los contratos cada tres meses. La necesidad de garantizar el suministro en un contexto de caída de la producción también obliga a los transformadores a subir los precios. De ahí que cualquier bandazo a la baja de la distribución pueda provocar fuertes desequilibrios en la cadena y de manera rápida.
¿Cuáles son los productos básicos?
Yolanda Díaz no desgranó para qué productos «básicos» pretende limitar el precio, pero sí que aludió a la fruta, la leche, el pan o los huevos. En Francia, cuando Nicolas Sarkozy negoció una medida parecida exigía al menos una pieza de fruta, carne, pescado, legumbres, productos lácteos, legumbres y una bebida.
Carrefour, por su parte, anunció este miércoles que lanzará una promoción de 30 artículos básicos por 30 euros entre los que se incluirán desayunos, conservas, pasta, aceite y café, junto a una selección de artículos de droguería, limpieza y perfumería.