Las tres grandes eléctricas esperan sentencia de la Audiencia Nacional por manipular el mercado
Iberdrola, Naturgy y Endesa acumulan una veintena de sanciones de bajo importe en los dos últimos ejercicios, pero las grandes multas de Competencia, 50 millones por manipular el mercado, acumulan años empantanadas en los tribunales
Ignacio Sánchez Galán durante la junta de accionistas de Iberdrola / EFE
Los mayores grupos comercializadores de electricidad en España, Endesa, Iberdrola y Naturgy, tienen una cuota próxima al 65% de toda la energía suministrada, que se eleva al 80% si nos referimos al consumo doméstico, según los datos del último informe del mercado minorista de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) correspondiente al ejercicio de 2019. Desde ese año, las tres compañías encajaron más de una veintena de sanciones por determinadas prácticas o incumplimientos que, como las que aspira a ejecutar la Xunta por el vaciado de embalses, suponen un importe insignificante para los grupos infractores.
Los 100.000 euros con los que aspira a sancionar el Gobierno gallego a Iberdrola y Naturgy, 25.000 por cada presa vaciada, suponen 17 veces menos de lo que ingresa la antigua Gas Natural cada hora; o 120 veces menos que el sueldo del presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán.
Sin embargo, sí que han sufrido las tres eléctricas multas de cuantías millonarias, concretamente tres, todas ellas pendientes de que la Audiencia Nacional resuelva sobre los recursos presentados por las empresas. A diferencia de la situación actual, el impacto económico de dichas sanciones está a la altura del daño reputacional.
Iberdrola y Naturgy manipularon los precios
Iberdrola encajó una multa de la CNMC en 2015 de 25 millones por manipular el precio de la energía mediante la generación de sus centrales hidráulicas, entre ellas, las del Sil que están siendo ahora investigadas. El grupo de Ignacio Sánchez Galán habría reducido el volumen de energía suministrado desde los embalses para encarecer la factura en las semanas previas a la subasta trimestral de 2013. La Audiencia Nacional está analizando el recurso presentado por la empresa contra la sanción.
Naturgy, por su parte, fue multada con 19,5 millones en 2019 por presentar “ofertas con valores anormales o desproporcionados con objeto de alterar indebidamente el despacho de generación” y provocar un encarecimiento de la electricidad, según explicó en su momento la CNMC. En este caso aludía a ocho de sus centrales de ciclo combinado: Besós 4 y Puerto de Barcelona 1 y 2, en la zona de Cataluña; Sagunto 1, 2 y 3 en la zona de Levante Norte; Málaga 1, en la zona Andalucía Oriental; y San Roque 1, en la zona de Campo de Gibraltar.
“En varios días del período comprendido entre octubre de 2016 y enero de 2017 en los que las centrales se encontraban disponibles, las ofertas no fueran casadas en el mercado diario, siendo necesario su programación posterior en el proceso de restricciones técnicas, produciéndose una alteración del despacho de generación y obteniendo Naturgy Generación, de esta forma, unos ingresos superiores”. El superregulador impuso ocho multas a Naturgy Generación, una por cada central, que ahora se dirimen en la Audiencia Nacional.
Publicidad engañosa e ilegal de Endesa
Finalmente, Endesa, hasta ahora a salvo de la polémica generada por el vaciado de embalses aunque no de sus consecuencias si, finalmente, el Gobierno reforma le ley, también recibió una sanción de 5,5 millones de euros por manipular el mercado. En este caso, la CNMC acusa al grupo de José Bogas de actuar de manera engañosa con los consumidores domésticos acogidos al Precio de Venta al Pequeño Consumidor (PVPC) con el objetivo de derivarlos al mercado libre. La compañía habría incluido publicidad en un canal privilegiado como las facturas para atraer clientes hacia su comercializadora libre con mensajes, según Competencia, confusos y que pretendían aprovechar “el escaso conocimiento del consumidor doméstico medio sobre las diferencias y consecuencias entre el suministro en el mercado libre y la comercialización de último recurso”.
Según manifestó Endesa en sus cuentas anuales, la multa está recurrida en la Audiencia Nacional ya que considera que “la CNMC funda sus conclusiones en meras presunciones no probadas”; que “la conducta de Energía XXI Comercializadora de Referencia (la comercializadora en cuestión) no reúne los requisitos necesarios para ser considerado un acto contrario a la buena fe”; y que tampoco “se ha logrado acreditar que la conducta imputada tuviera un impacto sobre la competencia y el interés público”.
Las multas menores
Estas cuantías relevantes, sobre todo en el caso de Iberdrola y Naturgy, coinciden con multitud de sanciones menores. Por ejemplo, en la memoria anual correspondiente al pasado ejercicio, la compañía de Francisco Reynés reconoce más de media docena: “En el ámbito de distribución de gas, la compañía ha recibido una sanción de 151.800 euros por facturación incorrecta y otra de 15.000 euros por cobro de un canon indebido”, dice la compañía, que anota también una muleta de 25.000 euros “por demoras en la prestación del servicio” de electricidad.
“Relacionadas con el negocio de la comercialización, Naturgy ha sido objeto de dos multas por un importe total de 72.189 euros por facturación incorrecta, una multa por valor de 15.000 por inadecuado funcionamiento del servicio de atención de reclamaciones, dos multas por un valor total de 21.369 euros por activación indebida de contrato de suministro y una última multa por introducción de cláusulas abusivas en los contratos, por un importe de 11.000 euros”, expone la eléctrica.
Endesa recibió siete sanciones en 2019 por razones similares, cuya cuantía más relevante ascendió a 140.000 euros, mientras que Iberdrola Clientes también recibió cuatro multas de 10.000 euros ese mismo año, según consta en los datos de Competencia.
