La Xunta bendice la mina de coltán gallega, que goza de una “solvencia económica aceptable”
Autoriza la explotación de una nueva zona en la mina a cielo abierto de Strategic Minerals, que prevé extraer 50 millones de toneladas de mineral durante 30 años, prorrogables a 75
Imagen de la Mina de Penouta, donde Strategic Minerals extrae coltán
Empujón de la Xunta de Galicia a la única mina de coltán de Europa, que se encuentra en Viana do Bolo, en Ourense, y está en manos de la compañía Strategic Minerals. La administración autonómica ha dado luz verde a otorgar el pase a concesión de explotación de recursos de la sección C del yacimiento de Penouta.
Así figura en una resolución publicada en el Diario Oficial de Galicia y firmada por la directora xeral de Planificación Enerxética de Recursos Naturais, Paula Uría. En la misma y entre otros motivos, los representantes de la Xunta de Galicia afirman que conceden esta resolución a la compañía porque goza de un “estado de solvencia económica aceptable”.
De capital español-americano, Strategic Minerals Spain desembarcó en la mina de Penouta en el año 2018, recuperando una planta que se encontraba abandonada desde el año 85, después de haber estado bajo el cargo de Rumasa durante varias décadas. Tras haber realizado sondeos previos desde 2011, la firma se dedicó a la extracción de tantalio y niobio, los dos metales que componen el coltán. Hasta el momento, estos se extraían de la denominada sección B del yacimiento.
Ahora suman una nueva zona de explotación en la que se encontraba situada la antigua mina, una explotación a cielo abierto con una extensión de 150 hectáreas donde los trabajos tendrán una duración de 30 años –prorrogables hasta un máximo de 75 años– a completar en seis fases de cinco años cada una.
Inversión de 40 millones en 30 años
El informe técnico favorable del Servizo de Enerxía e Minas recoge que las reservas calculadas son de más de 100 millones de toneladas de mineral susceptibles de ser explotadas. La explotación durante 30 años prevé la extracción de 50 millones de toneladas de mineral.
La previsiones de inversiones son de 40,5 millones de euros, con trabajos en el primer año por 1,6 millones. La Xunta sostiene que la compañía «goza de un estado de solvencia económica aceptable». Algo a tener en cuenta, ya que otros proyectos mineros no salieron adelante ante este requisito.
Garantía de 3,2 millones
“Para la acreditación de la solvencia económica requerida para ser titular del derecho minero, Strategic Minerals Spain entregó un extracto de las últimas cuentas anuales (entre 2016 y 2019) donde queda reflejada una cifra de negocio en ascenso a lo largo de tiempo, siendo en el último año de 23,3 millones de euros. Analizando los documentos entregados, a medida que la empresa aumenta la facturación, aumentan los costes de personal, de material en aprovisionamientos y otros costes de distinto orden, pero el beneficio sigue aumentando y redunda en un aumento en la cifra de negocio del siguiente año”, indica el expediente de la Xunta.
Además, y como muestra de solvencia, la Xunta propone a la compañía una garantía de 3,2 millones de euros, que se divide en dos conceptos: una partida de 1,6 millones de euros para responder “al cumplimiento de obligaciones de financiación y viabilidad ambiental” y una segunda de otros 1,6 millones «para el cumplimiento del plan de restauración».
Cuentas anuales
Al margen del informe de la Xunta, según se desprende de la memoria anual que la firma ha hecho pública Strategic Minerals Spain, su cifra de negocio ascendió a los 7,55 millones de dólares (unos 6,93 millones de euros al cambio actual) a lo largo de 2021. La cifra casi triplica a los 2,77 millones de dólares (unos 2,54 millones de euros al cambio actual) que registró a lo largo de un 2020 marcado por la crisis del coronavirus que llevó a la firma a aplicar un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) para la práctica totalidad de su plantilla.
Este empujón en los ingresos no ha sido suficiente, sin embargo, para sacar a Strategic Minerals Spain de números rojos, aunque sí para aminorarlos. En concreto, la compañía se anotó pérdidas por valor de 2,72 millones de euros a lo largo de 2021, lo que supone un descenso respecto a los 3,1 millones registrados el ejercicio anterior.
Críticas
El expediente ahora autorizado fue presentado para su análisis en octubre del 2020 y, tras ser sometido a valoración por 11 organismos diferentes, únicamente recibió una respuesta negativa por parte de la Federación Ecologista Galega, por lo que en diciembre del 2021 la Consellería de Medio Ambiente Territorio y Vivienda resolvió la Declaración de Impacto Ambiental del proyecto considerándolo «ambientalmente viable«.
Ahora, el Gobierno gallego ha dado luz verde a ese proyecto de explotación de los recursos de la sección C por parte de la empresa, que realizará un proceso íntegramente físico, empleando agua para separar los minerales más densos seguido de una separación magnética anterior al secado y su posterior venta, y además tiene la obligación de desarrollar los trabajos de recuperación de las zonas afectadas.
La concesión llega después de que distintas organizaciones ecologistas se opusieran a la misma y pidiesen que se denegase el proyecto por la afectación que supone para el entorno.
En concreto, a mediados del año pasado, Ecologistas en Acción pidió que se denegase porque implicaría «la continuación de vertidos directos con altas concentraciones de metales pesados sobre espacios protegidos de la Red Natura 2000«.
Los ecologistas lamentan que la situación «empeora» porque el «reprocesado de los materiales de las antiguas balsas no era más que una tapadera» para garantizar la obtención de los derechos para la explotación a cielo abierto, la sección C, con la que aseguran que la contaminación sobre el entorno de Pena Trevinca será «devastadora».
