La trituradora de Euroespes: cinco directores generales en cuatro años
La biotecnológica con sede en Bergondo ha incorporado a Joaquín Bueno como nuevo director general; será el quinto desde que el fondo Moira Capital se hiciese con más del 40% de las acciones de la empresa a finales de 2018
Euroespes suma y sigue. La empresa gallega, una de las seis representantes gallegas en el BME Growth (antiguo Mercado Alternativo Bursátil) ha designado a Joaquín Bueno López como nuevo director general. La compañía con sede en Bergondo ha remitido un comunicado al regulador bursátil en el que anuncia este nombramiento y la dimisión de José Pablo Cacabelos Pérez como consejero «por exceso de carga de trabajo».
Bueno López será el quinto director general que pase por Euroespes desde que el fondo Moira Capital (que capitanea Javier Loizaga) desembarcase a finales de 2018 al aflorar una participación que en la actualidad asciende al 44,2%.
Carrusel de cambios
Este baile accionarial implicó el aterrizaje de Moira Capital con dos representantes en el consejo de administración de Euroespes y la renovación de su equipo directivo. Así, Anders Bune Buchardt y Nicolás García Vázquez pasaron a ser nombrados nuevos responsables de negocio internacional y de finanzas, respectivamente, mientras que para la dirección general Euroespes optó por un fichaje procedente de Prima-Derm.
Se trataba de José Manuel Pascual Barea, que venía de haber desempeñado el cargo de consejero delegado en la compañía catalana durante los últimos cuatro años. Sin embargo, el directivo apenas duró diez meses en el cargo.
Y es que en octubre de 2019 Euroespes anunciaba la salida de Pascual Barea, dejando la dirección general de la firma en manos de Adolfo Arribas. El directivo había desempeñado distintos cargos durante casi dos décadas en Laboratorios Expanscience, empresa de la que fue director general para el sur de Europa, primero, y de España, después, antes de su fichaje por Euroespes.
Además de Arribas, la firma que preside Ramón Cacabelos también revelaba por aquel entonces que los cambios en su cúpula se extendían a la dirección comercial (a partir de entonces asumida por Juan Alfonso del Busto) y financiera, que quedaba en manos de Francisco Álvarez.
Guerra judicial con un exdirector general
Sin embargo, la etapa de Arribas en Euroespes apenas duró ocho meses. La compañía incorporó en mayo de 2020 a Tomás de la Calzada para, meses más tarde, anunciar su nombramiento como director general. Al igual que sus dos predecesores en el cargo, su etapa en la biotecnológica gallega duró menos de un año y dio paso a una guerra judicial.
Y es que el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) desestimó a comienzos de este año el recurso de suplicación que su antiguo alto directivo había presentado por su despido de la compañía. De la Calzada reclamó en los tribunales una mayor indemnización a Euroespes después de un «desistimiento del contrato del actor lo que se hizo de urgencia de un día para otro al haberse perdido la confianza en el alto directivo», según recoge la sentencia fechada el pasado mes de mayo.
Y es que, según quedó acreditado en sede judicial, De la Calzada habría mantenido una reunión ante «posibles socios/colaboradores brasileños» a los cuales les facilitó las claves para el acceso a la plataforma Mylogy, que estaba todavía en desarrollo. Los hechos fueron reconocidos por De la Calzada ante el propio presidente de Euroespes en una reunión previa a su despido en la que se produjo «una fuerte discusión». Desde entonces, Euroespes no notificó el nombramiento de ningún nuevo director general hasta la designación, la semana pasada, de Joaquín Bueno López.
El reto de sacar a Euroespes de pérdidas
El nuevo director general asumirá, junto al presidente de la compañía y accionista significativo, Ramón Cacabelos, el reto de sacar a la compañía de números rojos. Y es que Euroespes cerró el primer semestre de este año con unas pérdidas por valor de 307.153 euros.
Se trata de una cantidad ligeramente inferior a los 342.380 euros que se dejó en el mismo periodo de 2021, después de que la firma con sede en Bergondo elevase sus ingresos un 18,9%, hasta alcanzar los 1,66 millones de euros.