La promesa del candidato Sánchez: acabar con las subastas eléctricas
Pedro Sánchez prometió en diciembre de 2015 a los trabajadores de Alcoa en A Coruña acabar con las subastas eléctricas
Una revisión integral del sistema eléctrico. Esa fue una de las primeras medidas que tomaría Pedro Sánchez en caso de ser elegido presidente del Gobierno. Lo anunció en diciembre de 2015, en A Coruña, ante los trabajadores de Alcoa que ahora ven sus puestos de trabajo más en peligro que nunca.
En plena campaña, antes de las elecciones generales del 20 de diciembre de 2015, el candidato socialista a la presidencia del Gobierno mantuvo un encuentro con varios representantes del comité de empresa de la planta de Alcoa y se comprometió a acabar con las subastas eléctricas. También a buscar un sistema más racional que permitiera a la factoría coruñesa competir en igualdad con otros operadores europeos.
Pedro Sánchez junto a los trabajadores de Alcoa en 2015
Sánchez, «muy receptivo»
En ese momento Sánchez, según los propios trabajadores, fue «muy receptivo» a todas sus peticiones y les anunció que una de sus primeras acciones al frente del Gobierno sería aportar una solución «mucho más estable que la actual» para las grandes consumidoras de electricidad.
El candidato Sánchez también anunció en ese encuentro que en el primer consejo de ministros que celebraría abordaría la puesta en marcha de un plan de reindustrialización. Otra promesa más que, de momento, no ha sido puesta en marcha.
Los trabajadores de Alcoa explicaron a Sánchez que, con el paso del tiempo, «la planta se va deteriorando, la plantilla va bajando, no se contrata lo que hay que contratar». Toda una premonición que ahora se cumple.