La previsión del mercado: Alcoa volverá a beneficios mientras sale de San Cibrao
Los analistas creen que Alcoa, que negocia con la SEPI la venta de la planta de San Cibrao, volverá a ganar dinero en 2021. Las financieras suben el precio objetivo de sus acciones
El Gobierno central decidió poner esta semana al frente de la SEPI a Belén Gualda, hasta ahora presidenta de Navantia. La política granadina desembarca en la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales en un momento especialmente delicado para el organismo estatal, que negocia con Alcoa la compra de la factoría de San Cibrao y que, además, debe gestionar el Fondo de Apoyo a la Solvencia, dotado con 10.000 millones de euros y que busca rescatar a compañías especialmente afectadas por el impacto de la pandemia con préstamos participativos y deuda a largo plazo. No obstante, para los sindicatos, el nombramiento de la dirigente no representa un cambio de tercio en la situación con Alcoa.
Las centrales sindicales esperan que la compra de la factoría de desatasque cuanto antes y urgen al Estado a mover ficha, después de que en los últimos encuentros se constatase un cierto “estancamiento” en las negociaciones, que relacionan con la situación que atraviesa el grupo británico GFG Alliance, al que el Gobierno pretende traspasar la factoría de San Cibrao una vez la tenga en su poder.
La multinacional del empresario Sanjeev Gupta atraviesa momentos delicados debido a la quiebra de su principal financiador, Greensill, lo que habría motivado que el Ejecutivo estatal le demandase una serie de garantías para asegurar el hipotético traspaso del activo de A Mariña. No obstante, el comité de empresa de la planta da por hecho que existen más empresas interesadas en este momento.
Recuperación tras la caída de la pandemia
Pero, si a estas alturas todavía no se sabe a ciencia cierta si GFG se quedará con la aluminera gallega, lo que sí es una realidad es que los de Roy Harvey negocian con el Gobierno español en plena recuperación global. Si se cumplen las previsiones de los analistas, la corporación Alcoa se deshará de la última factoría de aluminio primario que queda en España en el ejercicio en el que saldrá de números rojos.
A nivel mundial, Alcoa cerró el ejercicio 2020, el del año de la irrupción del Covid, con unas pérdidas de 170 millones de dólares. La cifra es abultada, pero un 80% por debajo de las acuñadas en 2019. Fue en enero, en la presentación de resultados ante los analistas, cuando el CEO de la compañía, Roy Harvey, abrió por primera vez la puerta a la posibilidad de retomar las negociaciones con el Estado español y explorar la venta a la SEPI “si España realmente quiere seguir produciendo aluminio” y si se daban «unas condiciones razonables».
Según el consenso del mercado, este 2021, Alcoa podría cerrar el ejercicio con unas ganancias estimadas de 250 millones de dólares, cantidad que incrementaría en los siguientes años. Este miércoles, la compañía, que cotiza en la bolsa de Nueva York, cerró la sesión con el precio de la acción por encima de los 32 dólares.
Espaldarazo de Morgan Stanley
Hace un año, en plena debacle por el coronavirus, la acción caía hasta los 6 dólares, de forma que, en doce meses, el valor del título de la antigua dueña de las factorías de Alu Ibérica en A Coruña y en Avilés se ha quintuplicado.
Hay que tener en cuenta que en el último mes, Alcoa recibió numerosos espaldarazos: el 9 de marzo, Goldman Sachs mejoró el precio objetivo de la acción de la compañía de 19 a 32 dólares, que Deutsche Bank elevó hasta los 36 dólares. El empujón definitivo se produjo la pasada semana, cuando uno de los analistas de Morgan Stanley indicó que la acción podría llegar a los 43 dólares. Para los analistas, las probables políticas de descarbonización que emprenderá China, aunque a largo plazo, influirán en el mercado del aluminio ya que, al bajar la oferta, el precio del metal subirá. Además, los analistas creen que, precisamente ligado a las políticas verdes, el metal será más demandado.
Además, este mismo jueves, Alcoa comunicó que acababa de completar la venta de su negocio de laminación incluido dentro de la sociedad Alcoa Warrick, en Indiana (EEUU), a Kaiser Aluminium Corporation, una operación que anunció en diciembre del año pasado.
Venta millonaria en EEUU
El grupo indicó en un comunicado que había recibido “una contraprestación total de aproximadamente 670 millones de dólares, incluida la asunción por parte de Kaiser de otros pasivos relacionados con beneficios para empleados posteriores a la jubilación”.
La compradora de estos activos pasará también a ser clienta. Aunque vende parte de su negocio, Alcoa conserva la fundición de Warrick, con una capacidad de 269.000 toneladas métricas. “Como parte de la venta, Alcoa celebró un acuerdo de suministro de metal basado en el mercado, un arrendamiento de terreno a largo plazo y un acuerdo de servicios de transición con Kaiser”, apunta.
Previsiblemente, si Alcoa vende a la SEPI la planta de aluminio primario de San Cibrao, también se convertirá en proveedora del futuro dueño de la planta, sea quien sea, que precisará alúmina, que aún continuará produciéndose en A Mariña bajo el paraguas de los de Pittsburgh y su socia, Alumina Limited.
En lo que va de 2021, el precio de la acción de Alcoa ha escalado cerca de un 40%.