La ley del teletrabajo de Yolanda Díaz, en diez claves
La consultora EY elabora un decálogo con las claves para aplicar la nueva normativa del teletrabajo y desgranar cómo cambia el futuro del trabajo
El Consejo de Ministros de este martes aprobó la nueva regulación del teletrabajo elaborada por el Ministerio de Trabajo, capitaneado por la fenesa Yolanda Díaz. El Ejecutivo ha justificado la necesidad de poner en marcha de forma urgente esta fórmula a la que diversas empresas se han acogido desde el estallido de la pandemia y para la que la consultora EY ha elaborado un decálogo de claves para despejar las incógnitas de la nueva normativa.
La firma asegura que pese a que “solo un 8,3% de los ocupados en España optaban por trabajar desde casa”, según las últimas estadísticas europeas de 2019, el Banco de España asegura que hasta el 30% de la población ocupada podría teletrabajar, a lo que EY añade que aquellas empresas que consigan implantarlo satisfactoriamente podrán sostener su capacidad productiva de manera más sólida, incrementar sus niveles de productividad, y facilitar unas condiciones laborales más flexibles, lo cual ofrecería a las personas la oportunidad de conciliar mejor su vida laboral con la vida familiar o la posibilidad de vivir en áreas más alejadas de las grandes ciudades.
Voluntariedad y compensación de gastos
Desde EY también subrayan que la nueva normativa se basa en la voluntariedad, de forma que empresa y empleado deben pactar por escrito que se acogen al teletrabajo y que la negativa del trabajador no será nunca causa justificada de de despido. La consultora, además, aclara que el auge del teletrabajo tiene como límite el derecho a la desconexión digital y la organización de la jornada y que, se puede llevar a cabo de manera parcial. Es decir, alternando turnos en el centro de trabajo con otros en los domicilios.
Respecto a la compensación de gastos, desde EY aseguran que la empresa “deberá proveer de dotación y mantenimiento adecuado de medios, equipos y herramientas necesarios para el desarrollo de la actividad” sin que “pueda suponer la asunción por la persona trabajadora de los costes de los equipos asociados a la prestación de servicios”, al tiempo que aseguran que este repunte del teletrabajo creará “organizaciones híbridas con un entorno físico y virtual”. “El contacto físico seguirá siendo muy relevante para desempeñar determinadas actividades clave”, vaticinan.
Eso sí, los expertos de la consultora recalcan que el uso de la tecnología será “clave para aumentar la productividad y la satisfacción del empleado”, aunque abrirán un nuevo reto: el de liderar a distancia. “La pandemia generada por el Covid-19 ha provocado la necesidad de una comunicación más clara y transparente con todos nuestros empleados y la necesidad de ejercer un liderazgo más humanista, que sabe escuchar las preocupaciones de los empleados. En este contexto, el teletrabajo debe servir para dar respuesta a las preocupaciones de nuestros empleados, velando por su seguridad, pero también va a provocar un cambio profundo en la mentalidad de los directivos, que van a tener que aprender a liderar desde la distancia, y a mantener el compromiso de sus empleados en un entorno económico de alta incertidumbre”, recalcan, antes de concluir que en este “entorno es vital que las empresas dibujen un nuevo escenario en el que la comunicación con los empleados se convierte en vital para generar compromiso y potenciar la cultura empresarial en un entorno diferente. Asimismo, apostar por el learnability y la capacidad de aprendizaje de los empleados es esencial para el desarrollo de las organizaciones en un entorno en constante cambio”.