La jugada de Navantia para salvar el veto del Gobierno británico
La empresa pública firma un acuerdo con el astillero del Titanic, el norirlandés Harland and Wolff para hacerse con el macrocontrato de tres buques
Navantia mueve ficha para esquivar el posible veto del macrocontrato por el que puja en Reino Unido. La empresa participada por la Sociedad Española de Participaciones Industriales (SEPI) acaba de sellar un memorando de entendimiento con Harland and Wolff, el astillero norirlandés conocido, fundamentalmente, por haber sido el encargado de construir el emblemático Titanic.
Ambas compañía trabajarán en “multitud de proyectos marinos y de infraestructuras para plasmarla en acuerdos comerciales”. Entre estos puntos se encuentra la prestación de servicios a Navantia en el contrato para la construcción de tres barcos de apoyo a los portaaviones de la Royal Navy por el que la empresa española suspira, pero que el Gobierno británico ha dejado en stand by para reformular uno de sus puntos más polémicos.
Frente británico contra Navantia
Y es que tanto sindicatos, astilleros o partidos políticos como el Laborista, la UKIP e incluso altos cargos del Partido Conservador han mostrado su disconformidad con que este contrato se lo pueda acabar adjudicando una empresa extranjera en un momento en el que país negocia su salida de la Unión Europea.
Es por ello que, según el Financial Times, el Gobierno de Boris Johnson ha decidido suspender temporalmente este contrato tras haber recibido un informe de expertos en el que se critica que astilleros extranjeros puedan pujar por la construcción de buques logísticos para la Royal Navy. El estudio dejaba abierta la puerta a vetar a firmas no británicas (como Navantia, que puja por el contrato en alianza con la británica BMT) de este tipo de contratos como ya ocurre con los encargos de fragatas o buques militares.
«Significativas oportunidades comerciales»
La firma del acuerdo con Harland and Wolff eleva las opciones de Navantia para hacerse con este macrocontrato valorado en más de 1.000 millones de euros por el que compite con el consorcio formado por las británicas BAE Systems, Babcock y Cammel Laird, y con la japonesa Japan Marine United Corporation
“Navantia es reconocida mundialmente por sus capacidades en la construcción de barcos y por su experiencia en infraestructuras offshore y, por lo tanto, tiene acceso a significativas oportunidades comerciales en estos sectores”, se congratula John Wood, CEO del grupo InfraStrata, dueña del astillero Harland and Wolff.