La inagotable volatilidad de Pharma Mar
La biofarmacéutica de José María Fernández de Sousa vuelve a desplomarse en bolsa una semana después de lograr sus mayores subidas del año
Pharma Mar acumula un mes de vaivenes en bolsa, rompiendo soportes y resistencias sin que la antigua Zeltia detecte un motivo que justifique tanta volatilidad, como comunicó a la CNMV el 16 de octubre. Estaba convencida la compañía de que el valor, que llegó a caer por debajo del euro, está infraponderado, una vez descontada la corrección que provocó la negativa de la Comisión Europea a la comercialización del antitumoral Aplidin y los negativos resultados de Zepsyre para cáncer de ovario.
Hace solo una semana, los títulos de la compañía participada por Sandra Ortega remontaban, anotándose las mayores subidas del año. Pharma Mar se revalorizó el jueves pasado un 16% y el viernes otro 12%, con las acciones intercambiándose holgadamente por encima del euro. Este viernes, la cotizada vuelve a desplomarse en el parqué con una caída del 5,7%, una depreciación próxima a los 35 millones de euros.
Caída tras un ensayo clínico positivo
La caída se produce un día después de que la farmacéutica anunciara un ensayo positivo sobre la aplicación de Zepsyre (lurbinectedina) en cáncer de mama metastásico. Según trasladó Pharma Mar, se trata de un estudio de fase II que reveló la actividad clínica de lurbinectedina en pacientes con cáncer de mama metastásico que presentaban mutaciones en los genes BRCA1 y/o BRCA2.
“Es importante destacar que en pacientes con mutaciones en BRCA2, la tasa global de respuestas confirmadas fue del 61%, la supervivencia media libre de progresión fue de 5,9 meses y la mediana de la supervivencia global fue de 26,6 meses. En la población no tratada previamente con inhibidores de PARP, la tasa de respuestas sube a un 72%, que es la tasa de respuestas más alta publicada hasta hoy en esta indicación”, explica la compañía.
Pharma Mar se deja casi 300 millones
La capitalización de Pharma Mar cierra la semana cerca de los 267 millones de euros, mostrando una depreciación de más de 280 millones respecto a los 552 millones que valía en el parqué a comienzos del año. Está, sin embargo, lejos de su mínimo anual, pues llegó a cotizar a 0,87 euros por título.