La guerra entre Sandra Ortega y su ex número dos, en manos de cuatro bancos
Deustche Bank, Abanca, Banca March y Bankinter, personados en la causa, estudian alegaciones como parte afectada de la querella interpuesta por Sandra Ortega contra José Leyte por administración desleal
Cuatro bancos tienen en sus manos la llave para decidir el futuro procesal de la guerra abierta por Sandra Ortega contra su ex número dos, José Leyte. Esas cuatro entidades están personadas como parte afectada en la querella presentada por la mujer más rica de España contra su ex directivo, despedido en noviembre, y acusado de administración desleal y falsedad documental.
De un total de seis bancos afectados por el proceso de financiación de Room Mate, nudo gordiano del conflicto y de la querella presentada por Sandra Ortega, son los equipos jurídicos de cuatro, Deustche Bank, Abanca, Banca March y Bankinter, los encargados ahora de estudiar los pasos a dar tras la suspensión de la declaración de Sandra Ortega de este miércoles en el Juzgado de Primera Instancia número dos de A Coruña. De esos bancos depende que, en última instancia, se active una querella contra la primogénita de Amancio Ortega si se demuestra que estaba al corriente de que el propio Leyte firmaba en su nombre determinados documentos bancarios.
Un proceso largo e imprevisible
El trecho es largo, pero la titular del Juzgado número dos de A Coruña ha decidido, tras escuchar la declaración de Leyte, y también al abogado de Deustche Bank, que era procedente abrir un período de alegaciones a las partes debido a que, si declarase este miércoles, Sandra Ortega debería responder a unas preguntas que la podrían incriminar y de las que se podía derivar su responsabilidad penal en el proceso.
Es decir, los delitos de administración desleal y falsedad documental que le atribuye Sandra Ortega a Leyte se podrían volver en contra de la segunda accionista de Inditex si si su ex número dos puede probar su versión. De acuerdo con la exposición de Leyte, la suplantación de la firma para validar “comfort letters” (cartas de patrocinio, garantías ante los bancos) era algo “habitual”, “conocido y “consentido” por la propia Ortega. Se hizo ante los cuatro bancos que ahora están personados en la causa y otros dos más, Société Générale y EBN, con el fin de que una participada, Room Mate, lograse financiación ante los problemas de liquidez y solvencia que tenía.
El silencio de Ortega y las “comfort letters”
El equipo jurídico de Sandra Ortega, los abogados de Garrigues, guarda silencio, aunque también podrá presentar alegaciones a instancias de la titular del juzgado.
Las cartas de garantías en las que, supuestamente, Leyte habría suplantado la firma de Sandra Ortega sirvieron para dar oxígeno a Kike Sarasola, socio de la segunda accionista de Inditex en Room Mate, y su saldo vivo podría ascender a unos 100 millones de euros. En la querella inicialmente presentada contra su ex directivo, los abogados de Sandra Ortega aluden a unos 140 millones de euros, aunque matizan que su importe exacto podría variar debido a que algunas “comfort letters” servían para cancelar otros préstamos.