La Fiscalía pide un año de prisión para el fundador de Blusens por su ‘receptor pirata’
Un juzgado de Santiago decreta la apertura de juicio oral por un delito contra la propiedad intelectual. No obstante, la antigua Blusens habría cerrado un acuerdo hace casi dos años con los demandantes
José Ramón García, el fundador de Blusens, irá a juicio por su ‘receptor pirata‘. El Juzgado de Instrucción número 3 de Santiago de Compostela ha decretado la apertura de juicio oral contra el empresario y ocho acusados más por un delito contra la propiedad intelectual relacionado con el caso de un receptor de la firma que facilitaba el acceso a contenido ‘pirata’.
No obstante, hay tranquilidad absoluta por parte de los responsables de la ya extinta Blusens, que aseguran que ya hace dos años que se llegó a un acuerdo entre las partes que, ahora, necesita de la finalización del proceso judicial para poder cerrarse.
Petición de la Fiscalía
La Fiscalía pide un año de cárcel y una multa de más de 3.200 euros (nueve meses con cuota de 12 euros al día) para el fundador de Blusens y otros cuatro acusados más. Para los restantes cuatro encausados, el Ministerio público rebaja la pena de cárcel a nueve meses, pero mantiene la misma cuantía de multa.
Pero, además, los acusados deberían hacer frente, según la Fiscalía, a una indemnización de 1,2 millones de euros en concepto de responsabilidad civil. La misma cuantía que la Fiscalía pide que se le imponga como multa por el beneficio obtenido a las personas jurídicas (‘Blusens Technology, S.L’, ‘Magna Technology, S.L’, ‘Amazing Store Investiments’, ‘Moonoff, S.L‘, y ‘Tendeus, S.L’). Además, para ellas también reclama la prohibición de realizar, en el plazo de cinco años, actividades en cuyo ejercicio se hubieran cometido, favorecido o encubierto los delitos antes indicados.
No obstante, consultados por Economía Digital Galicia, los responsables de la extinta Blusens guardan absoluta calma ante el proceso. De hecho valoran “de forma muy positiva cualquier avance que permita que el caso quede zanjado definitivamente”.
Acuerdo entre las partes
Aseguran que, en realidad, el conflicto «ya está resuelto» pues hace dos años se habría alcanzado un acuerdo entre las partes del que ya solo restaría la ratificación desde el punto de vista judicial, motivo por lo que este proceso es necesario. “Vivimos una situación muy dura, padecimos una pena de portadas y telediarios por un caso que se resolvió amistosamente”, explican fuentes de la antigua tecnológica gallega, que destacan que invirtieron “muchos esfuerzos en emprender nuevos proyectos diferentes a Blusens, por lo que cualquier avance que signifique acabar con esto es más que bienvenido”.
Según su versión, en el año 2019, se habría alcanzado un acuerdo entre las partes en el que las acusaciones particulares habrían admitido que la comercialización del receptor era legal. No obstante, la compañía gallega también reconocería su responsabilidad por no haber sido “lo suficientemente diligentes” en la protección de la propiedad intelectual de los contenidos, ya que los usuarios podían acceder a los mismos con la instalación de aplicaciones, en todo caso, “desarrolladas por terceros”.
Pago de un canon por aparato
“Esto supone que la empresa haya pagado un canon por aparato, así como la asunción de penas acordadas para señalar la necesidad de que se proteja la propiedad intelectual”, evidencian.
En cuanto a la petición de la Fiscalía, explican las misms fuentes que el escrito “va en la misma línea del acuerdo”, si bien las acusaciones solicitan penas menores y eximen de toda responsabilidad a las empresas citadas, a excepción de las que fabricaban el webtv. “En cualquier caso, la Fiscalía cumple con su deber y, para nosotros, es importante que se den todos los trámites necesarios para que el caso quede completamente zanjado”, resuelven.