La Fábrica de Armas afronta el cierre con más de seis millones en deudas
Hércules de Armamento, que explota la Fábrica de Armas de A Coruña, apenas supera los 116.000 euros de ingresos, ocho veces menos que el coste de personal
La presumible retirada de la concesión de la Fábrica de Armas por el impago del canon de 250.000 euros anuales al Ministerio de Defensa, coge a Hércules de Armamento, la concesionaria, en su peor momento, con las deudas acumulándose y con una cifra de negocio irrelevante, situación que se repite desde la adjudicación en el discutido concurso de 2014.
Así lo atestigua la memoria de ejercicio de la empresa dirigida por Ramón Mejuto, que facturó en 2017 solamente 116.587 euros. Es mucho más que los 49.000 euros de cifra de negocio con los que cerró 2016, pero a todas luces insuficiente. Solo los gastos de personal de Hércules de Armamento superaron los 993.000 euros el año pasado, ocho veces más que los ingresos por ventas. Esa diferencia es dramática para una empresa que no recibe dividendos ni tiene ingresos financieros.
Las deudas acumuladas por la Fábrica de Armas
Con esta dinámica, las deudas se han ido acumulando para la concesionaria. Cerró su último ejercicio con un pasivo de 6,5 millones, de los cuales, un millón correspondían a deudas con entidades de crédito, y el resto con otros acreedores, entre los que se incluyen trabajadores, la Seguridad Social y proveedores.
El agujero contable ascendía a 1,6 millones, la cuantía en la que se cifraba el patrimonio neto negativo de Hércules de Armamento. Sin embargo, todo indica que será mayor, pues, de producirse la retirada de la concesión, la empresa, que buscó con desesperación a lo largo de los años la entrada de un socio externo, perderá su principal activo.
Hércules de Armamento pagó mediante avales hasta ahora
De completarse la reversión de la concesión, para lo que debe dar el visto bueno el Consejo de Estado a través de un informe, quedará saldado el impago del canon, no habrá una nueva reclamación, pero perdurarán el resto de deudas.
Hasta este año, Defensa había cobrado la cuota anual mediante la ejecución de avales con los que Hércules de Armamento garantizó el contrato de concesión.