La cúpula de Alcoa insta al Gobierno a arreglar el problema energético para vender San Cibrao
La multinacional norteamericana, que ha logrado ingresos y beneficios récord en el tercer trimestre, prevé pérdidas de 90 millones de dólares hasta final de año por la huelga en la planta de Lugo
Impulsada por el incremento de los precios del aluminio, Alcoa ha cerrado un tercer trimestre récord, con 3.100 millones de dólares de facturación, un 10% más que en el trimestre anterior y 750 millones más que en el mismo periodo de 2020. El precio de venta del aluminio primario fue, de media, un 13% superior. Esto permitió que las ganancias se elevaran a 337 millones, en contraste con las pérdidas de 49 millones del mismo periodo del año pasado, y superando los beneficios de 309 millones de dólares del trimestre precedente.
El buen comportamiento de Alcoa, evidenciado en un ebitda que se disparó un 18% (hasta los 728 millones), tiene una excepción en Lugo. En la presentación para inversores de los resultados cerrados el 30 de septiembre, el grupo con sede en Pittsburgh deja un mensaje claro sobre el futuro de la planta de San Cibrao. “Alcoa mantiene su compromiso de transferir la fundición de aluminio a un tercero tan pronto como el Gobierno español pueda desarrollar e implementar un marco energético competitivo que haría viable la fundición”, dice la compañía que capitanea Roy Harvey.
La energía vuelve al centro del debate
Es el tercer mensaje de la multinacional en poco espacio de tiempo que apunta en la misma dirección. El primero fue su propuesta para vender directamente la planta, sin la mediación de la Sepi, en 2022 si se garantizaba un marco energético estable y competitivo que hiciese viable la actividad. Posteriormente fue el director financiero, William Oplinger, quien señaló ante analistas que el precio de la energía en España era el más alto de su red de producción, y quizá el “más alto del mundo para fundir”.
Ahora, en la documentación remitida al regulador norteamericano insiste en que “el precio de la energía en España para la fundición supera con creces los promedios de las fundiciones mundiales y de la Unión Europea”.
El impacto de la huelga en San Cibrao
Alcoa también informa de la huelga que están desarrollando los trabajadores contra el bloqueo de la venta de la factoría, la única solución sobre la mesa para mantener la actividad una vez que la compañía anunció su intención de desmantelarla casi por completo y prescindir de más de 500 trabajadores.
La multinacional señala que están bloqueados los envíos de aluminio y que en el próximo trimestre dejarán de comercializar unas 52.000 toneladas métricas si se mantienen los paros. El impacto previsto entre octubre y diciembre por esta situación rondará los 90 millones de dólares, unos 77,5 millones de euros.
“Las operaciones de refinación y fundición de San Cibrao enfrentan costes de energía y materias primas significativamente más altos, así como la pérdida de primas de valor agregado mientras persistan las condiciones de huelga”, indica Alcoa.