La banca descarta el concurso en Barreras y apuesta por Ritz Carlton
La carga de trabajo aseguraría la continuidad del astillero, cuyo principal problema radica en el sobrecoste generado por el crucero de la firma americana
La banca tiene claro que el astillero vigués Hijos de Barreras no está abocado al concurso de acreedores. Fuentes consultadas por este medio aseguran que el problema de la constructora naval “está más relacionado con el reparto accionarial que con su situación financiera, ya que hay que recordar que tiene una cartera de pedidos muy amplia”. “Efectivamente, existen sobrecostes relacionados con la construcción del crucero para Ritz Carlton, pero estos pueden ser solucionados con la capitalización de la deuda”, apuntan las mismas fuentes, que dan por hecho la entrada de empresa hotelera, en manos del fondo de inversión Oaktree, una vez alcance un acuerdo con la petrolera mexicana Pemex, que tiene la mayoría accionarial.
En 2017 Barreras firmó una póliza de garantías con seis entidades que incluía un aval sindicado con un límite máximo de 186 millones de euros. El contrato, según la propia compañía naval, tendría como objetivo garantizar frente al armador el cumplimiento de determinadas obligaciones de reembolso asumidas bajo el contrato de construcción. No obstante, según las fuentes consultadas, “se trata de un aval que se va renovando con distintos proyectos” que, en principio, no despierta la alarma de las entidades acreedoras.
Las entidades consultadas circunscriben la actual situación de Barreras a los sobrecostes generados en el proceso de construcción del crucero para Ritz Carlton. Si, como parece, la compañía está dispuesta a capitalizar su deuda y a llegar a un acuerdo con Pemex, los problemas de la naval se solventarían gracias a los compromisos de carga de trabajo que tienen.
Ritz Carlton toma posiciones
Pero si bien distintas voces apuntan a la posible entrada de Ritz Cartlon en Barreras (el expresidente del astillero, José García Costas, así como la naviera Albacora le ofrecieron su participación en la compañía), hasta el momento no existe ninguna confirmación oficial. Sin embargo, dos hechos acaecidos este martes parecen venir a refrendar la teoría de que la firma americana está ya tomando posiciones.
En primer lugar, Ritz Carlton mantuvo una reunión en Madrid con representantes de la Xunta de Galicia y de la asociación de astilleros Pymar para abordar la situación de Barreras. En segundo lugar, la filial de cruceros de Ritz envió un comunicado en el que avanzaba que, debido a los retrasos en la ejecución del barco, no podrá estrenar su línea de cruceros en la fecha prevista (el 5 de febrero). En ese anuncio, indicaba, no obstante, que “tanto la nueva junta de Hijos de Barreras, como la de Ritz Carlton Yatch Collection están trabajando de manera cooperativa hacia una solución a largo plazo para el astillero”.
El papel de la Xunta
Mientras tanto, la Xunta de Galicia volvió este martes a evidenciar su voluntad de colaborar en una eventual “solución” para Barreras, pero siempre que esta “sea de carácter integral” y englobe tanto a la plantilla directa como a las empresas proveedoras y auxiliares.
Para eso, el ejecutivo gallego ha solicitado a Ritz Carlton la auditoría que la firma realizó a la empresa viguesa luego de los problemas registrados en la construcción del crucero. “Antes de tomar ninguna decisión, debemos conocer la situación del astillero y cuáles son las necesidades a cubrir para dar respuesta a la carga de trabajo que tiene en cartera”, indican fuentes del gobierno autonómico.