La armadora de Villa de Pitanxo, una máquina de ganar dinero
El grupo consolidado de Pesquerías Nores Marín triplicó su beneficio neto en 2020, el primer año de la pandemia, hasta los 5,8 millones de euros
Más allá del sector pesquero y de Marín, donde tiene su base, el Grupo Nores era un gran desconocido hasta el hundimiento del Villa de Pitanxo, con un balance de nueve muertos, doce desaparecidos y solo tres supervivientes. Detrás de ese naufragio se encuentra uno de los grupos pesqueros gallegos que se podrían considerar medianos, con unas ventas superiores a los 35 millones de euros, muy internacionalizado y también muy saneado.
Como tal, el Grupo Pesquerías Nores Marín se constituyó en mayo de 2008 e integra, como estructura consolidada, varias sociedades dependientes y asociadas. Es el caso, por ejemplo, de Nores Marín Comercial SL, Pesquerías Manuel Nores Canarias SL, Frigoríficos de Galicia SA, Auxiliar de Servicios Teis SA y Nores Marine Limited. El grupo que administra José Antonio Nores Rodríguez ingresó en 2020, el año de arranque de la pandemia y último con cuentas presentadas en el Registro Mercantil de Pontevedra, unos 35,3 millones de euros, lo que supuso un incremento del 9,5% con respecto a las cotas alcanzadas en el ejercicio anterior, cuando la cifra de negocio había ascendido a 32,2 millones.
Los beneficios se disparan
Fue en los beneficios de explotación donde el Grupo Nores dio un paso de gigante en 2020, al multiplicarse por cinco, hasta los 7,3 millones de euros. El beneficio neto consolidado del grupo pesquero tuvo un crecimiento menor, aunque abultado, ya que se multiplicó por tres, al pasar de los 2,1 millones de 2019 a los 5,8 millones en 2020.
El grupo lleva a cabo una política de aumento constante de los fondos propios para incrementar la autofinanciación, y eso lleva a que los resultados del ejercicio se destinasen a reservas. Así, los fondos propios alcanzaron en 2020 los 26,5 millones de euros. La proporción entre patrimonio neto y fondos ajenos dentro de la estructura financiera del balance, es del 73,7% y 26,2%, respectivamente.
El golpe de la Audiencia Nacional
Ese mismo año al que van referidas las cuentas, el grupo encajó una sentencia de la Audiencia Nacional, a mediados de 2020, que tumbaba los recursos contenciosos interpuestos por la armadora del Villa de Pitanxo. Tanto el patrón como Pesquerías Nores Marín habían sido multados por el Ministerio de Agricultura y condenados por la Audiencia Nacional por ocultar fletán, obstrucción a los inspectores y eliminación de pruebas, infracciones consideradas graves por ley. Esa sentencia se sumaba a otra anterior, de 2017, que iba en la misma dirección, que desestimó un recurso del armador del barco y permitió reconstruir las trampas para ocultar las capturas de fletán negro excedidas y no declaradas, según desveló Economía Digital Galicia.
Ese año, el grupo tenía mercancía pescada en trayecto o en las bodegas de los buques por importe de más de 496.000 euros y unos 10,8 millones de euros de pescado en cámaras frigoríficas, según revelan las cuentas consolidadas del Grupo Nores.