El juez cita a Iberdrola por la supuesta manipulación del precio de la luz desde sus embalses gallegos
La Audiencia Nacional ha fijado entre el 17 de octubre y el 1 de diciembre de 2023 el juicio contra Iberdrola Generación y contra cuatro exdirectivos de la eléctrica
El juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno ha fijado para otoño de 2023 el juicio a Iberdrola Generación por manipular los precios de la luz en el invierno de 2013. El procedimiento por un supuesto delito contra el mercado y los consumidores juzga un presunto encarecimiento artificial del precio eléctrico, que la compañía habría conseguido al manipular la actividad de sus centrales hidroeléctricas del Duero, el Sil y el Tajo.
Las sesiones se celebrarán en la sede que la Audiencia Nacional tiene en San Fernando de Henares (Madrid), y en ella figuran como imputados, además de la empresa, cuatro de quienes fueran sus directivos. El titular del juzgado central de Instrucción nº 2 impuso una fianza de 192,3 millones de euros a la filial de la energética, y 107,5 millones a cada una de las personas físicas para garantizar una futura responsabilidad civil derivada del proceso.
Anticorrupción pide una multa de 85 millones
La Fiscalía Anticorrupción solicita una multa de casi 84,9 millones de euros para Iberdrola Generación España, así como dos años de prisión e inhabilitación y multa de 12 meses con una cuota diaria de 400 euros para los entonces cuatro directivos.
También fija que los acusados indemnicen hasta un máximo de 107,3 millones de euros -importe del presunto perjuicio a la demanda- de forma conjunta y solidaria a varias comercializadoras y a las personas físicas y jurídicas que acrediten haberse visto afectadas, entre ellas, consumidores finales de energía.
Para el Ministerio Público, Iberdrola Generación, «con la finalidad de provocar una subida del precio de la energía eléctrica y perjudicar a los consumidores, ideó y puso en funcionamiento un sistema para incrementar el precio de la energía que vendía más allá del que debiera resultar de la libre concurrencia de oferta y demanda».
Para conseguirlo, prosigue, entre el 30 de noviembre y el 23 de diciembre de 2013 «aumentó, sin causa legítima que lo justificara, el precio en las ofertas de energía eléctrica correspondiente a sus centrales hidráulicas de Duero, Sil y Tajo».
El mecanismo fraudulento de Iberdrola
Dichas centrales dejaron de producir, explica Anticorrupción, que señala directamente a la entonces directiva de Iberdrola Generación, compuesta por el director de gestión de la energía, Ángel Chiarri; el responsable de optimización, gestión de recursos y trading, Gregorio Relaño; el responsable de gestión de activos, José Luis Rapún; y el responsable de mercados a corto plazo y generación global, Javier Paradinas.
A tenor de sus cálculos, el «artificio urdido y llevado a cabo» por los acusados habría elevado el precio de la energía eléctrica en, al menos, 7,156 euros megavatio hora (MWh), lo que ocasionó un perjuicio a la demanda superior a los 107,3 millones de euros.
Si se tiene en cuenta el volumen de energía que Iberdrola Generación despachó durante los días objeto de investigación, unos 2.965,8 gigavatios (GW), el presunto beneficio obtenido ascendería a 21,2 millones de euros.