Horacio Gómez, ex del Celta, se topa con el fisco: fusionó empresas solo para ahorrarse impuestos
La Sala de lo Contencioso de la Audiencia Nacional desestima un recurso de Hogomar, matriz del grupo del expresidente del Celta, que fue sancionada por Hacienda por las desgravaciones aplicadas en una operación de fusión con otra filial
Horacio Gómez se topa de nuevo con los jueces. El expresidente del Celta, que fue inhabilitado por dos años por las irregularidades contables detectadas en plena suspensión de pagos del conjunto celeste, retomó los negocios familiares hace unos años. Ahora, una de las sociedades de cabecera de su grupo llega hasta la Audiencia Nacional para demostrar que no absorbió sociedades solo para ahorrarse impuestos. Y no lo consigue.
En una sentencia del pasado mes de noviembre, la Sección Segunda de la Sala de lo Contencioso de la Audiencia Nacional tira por tierra todos los argumentos que mantiene en su recurso la defensa de Horacio Gómez, que pivota sobre la actuación de la sociedad Hogomar 2000 SL, una de sus sociedades holding. Hogomar había recurrido una resolución del Tribunal Económico Administrativo Central, de 2018, por la que se desestimaban sus reclamaciones frente a un acuerdo de liquidación de la Agencia Tributaria referida al Impuesto sobre Sociedades, declaración consolidada, de los ejercicios 2009 a 2011, y también a las sanciones que le había impuesto.
Bases imponibles negativas de la filial
La sentencia reconstruye el caso. Hogomar 2000, como cabecera del grupo, absorbió a la filial Gestidisa 2005 SLU, que contaba con unas bases imponibles negativas, procedentes de años anteriores, y realizó la compensación de estas en 2011. Las bases imponibles negativas representaban pérdidas de ejercicios anteriores que todavía no habían sido compensadas. La inspección de Hacienda rechazó esta compensación por resultar inaplicable el régimen especial planteado, dado que a juicio de sus técnicos la operación no se realizó por motivos económicos válidos, sino con la mera finalidad de la compensación por parte de Hogomar de las bases imponibles negativas de la entidad absorbida.
El recurso del grupo de Horacio Gómez puso el acento en los motivos económicos de la operación, sosteniendo que fueron válidos, y no meramente tendentes a obtener la ventaja fiscal, afirmando, como conclusión que “queda acreditado que el motivo económico válido de la fusión entre Hogomar 2000 y Gestidisa 2005 es la reorganización empresarial en el ámbito del arrendamiento de inmuebles”, según recoge la sentencia.
Una empresa inactiva
Los magistrados dan por válidas las pesquisas de la inspección de Hacienda, que concluyeron que la sociedad absorbida (Gestidisa) era una sociedad inactiva, que no realizaba ninguna actividad, siendo propietaria de dos inmuebles. Y, de ello, extraen el razonamiento de que la operación de fusión entre Hogomar y Gestidisa no se efectuó por motivos económicos válidos, sino con la mera finalidad de conseguir una ventaja fiscal, cifrada en casi medio millón de euros.
En su momento, la inhabilitación de Horacio Gómez había sido por dos años a causa de las “irregularidades contables relevantes” en los números del Celta de Vigo, que estaba en concurso de acreedores. La condena del Juzgado de lo Mercantil número 1 de Pontevedra en 2011 fue ratificada por la Audiencia Nacional al año siguiente, tumbando el recurso presentado por Gómez. Después de ese trance, el empresario de Tomiño retomó los negocios familiares. Hasta que se ha topado de nuevo con el fisco.