¿Hora de la verdad para Shein? El rival chino de Inditex busca captar 2.000 millones para salir a bolsa
La valoración de la multinacional china para esta nueva ronda de financiación, que se llevará a cabo este mes, se redujo a 64.000 millones, un tercio menos que la que tenía en la anterior recaudación de fondos
Shein calienta motores ante su posible salida a bolsa. El gigante de la moda ultra low cost está preparando una ronda de financiación para recaudar, a lo largo de este mes, cerca de 2.000 millones de dólares para afianzar su entrada en el mercado bursátil, prevista para la segunda mitad de este año.
Según avanza Reuters, los nombres que suenan con fuerza para esta nueva ronda son los del fondo soberano de los Emiratos Árabes Unidos Mubadala, la firma de capital privado General Atlantic (GA) y el grupo de capital riesgo Sequoia Capital China. Para esta recaudación de fondos, la valoración de la compañía se redujo a 64.000 millones de dólares, lo que supone un tercio menos que la que tenía hace justo un año.
Los de Chris Xu han estado recientemente en conversaciones iniciales con varios bancos de inversión para designar a los principales operadores que colocarán la oferta pública de venta.
Salida a bolsa
Según estiman los analistas, en caso de producirse, la salida de Shein a bolsa sería una de las mayores a nivel mundial y una oportunidad para comprobar el ánimo inversor estadounidense en firmas chinas en un escenario de volatilidad de los mercados de capitales y de tensiones geopolíticas.
Los inversores que ya participaron en la captación de fondos realizada el año pasado, tal y como explican en Reuters, harán un ajuste del valor de las acciones que adquirieron anteriormente con el objetivo de «reflejar la valoración actual de la empresa».
No es la primera vez que la multinacional china intenta cotizar en bolsa. En concreto, en 2020 saltaron las alertas sobre su posible irrupción, aunque las crecientes tensiones entre EEUU y China tumbaron la iniciativa. Por entonces, la empresa líder del fast fashion contrataron a Bank of America, Goldman Sachs y JPMorgan para gestionar la operación.
Cabe recordar que la actual salida a bolsa estará marcada por la regulación china aprobada el mes pasado en el que se establecen las pautas que deben seguir las compañías para empresas en el extranjero. Esta legislación, en términos generales, exige obtener el visto bueno de distintos organismos gubernamentales, algo que, según cuestionan desde las casas de inversión, da lugar a un largo proceso de aprobación.
Por el momento, según señala Reuters, no está claro que la compañía busque la aprobación regulatoria del Gobierno chino para su salida al parqué.
La elevada valoración de la compañía ante un posible debut como cotizada continúa por debajo de la de Inditex, cuya capitalización está por encima de los 90.000 millones de euros a una semana de presentar resultados.