Hablan dos expresidentes: "Urge recuperar la imagen de la patronal"

Con la vista puesta en las elecciones del próximo 24 de noviembre, las confederaciones provinciales que integran la patronal gallega hacen llamamientos a la unidad. Lo urgente ahora es frenar la batalla interna y el fuerte deterioro que ha sufrido la imagen de la Confederación de Empresarios de Galicia en los últimos años, con tres presidentes que no acabaron mandato y tres años de interinidad con una comisión de vicepresidentes al frente. Así piensan al menos dos de los expresidentes de la entidad, que, en declaraciones a este medio, han pedido un candidato de consenso para el proceso electoral, aunque difieren sobre el perfil idóneo para el cargo.

José Manuel Fernández Alvariño sucedió a Antonio Fontenla, el líder de los empresarios coruñeses, como presidente de la Confederación de Empresarios en 2013. Encaró un mandato ambicioso, con la intención de modernizar la institución y reformar los estatutos. En 2015 convocó elecciones ante la imposibilidad de aprobar las cuentas y presupuestos. Entendía el empresario vigués que hacerse a un lado facilitaría la unidad, pero lo cierto es que la CEG continúa empantanada cinco años después de su salida.

Antonio Dieter Moure llegó a la presidencia de la patronal a comienzos de 2016, pero solo estuvo nueve meses en el cargo. Las disputas internas lo empujaron a presentar su dimisión. Cuando hizo oficial su decisión, aseguró que el presidente de la Confederación de Empresarios de Galicia era «un reo» de los presidentes provinciales y lamentó que primaran los intereses personales en lugar del futuro de la institución. Tras de sí dejó un plan de viabilidad para tratar de arreglar las cuentas de la patronal.

Ambos piden el máximo consenso posible para recuperar el prestigio de la patronal ahora que Galicia afronta una nueva crisis económica, esta vez, por culpa del coronavirus.

Ni intrigas, ni manipulaciones

Antonio Dieter: «Lo primero es tener una candidatura de consenso y empezar a olvidarse de manipular la Confederación de Empresarios. Todas las cosas que estropeaban el consenso hasta ahora, que son intereses personales, tienen que desaparecer. Mientras eso no desaparezca, el consenso va a ser imposible. Tengo la esperanza de que se consiga, pero también tengo mis dudas. Lo único que juega a favor de este momento es que la Confederación de Empresarios no puede permitirse más errores. ¿Qué papel jugará la CEG si vuelve a haber unas elecciones y no hay candidato? ¿O si se celebran unas elecciones como las últimas?», dice el expresidente, que considera que en las elecciones que auparon a Antón Arias a la presidencia, la patronal de A Coruña rompió la unidad para poner a su propio candidato.

«Todos esperamos que haya una candidatura de consenso y que no haya manipulaciones de nuevo. Eso es lo que yo deseo, porque permitirá que se empiecen a resolver los asuntos pendientes y a que la patronal se vea como se tiene que ver. Hay que recuperar la imagen de la Confederación y los empresarios tienen que ver en la institución un instrumento para trabajar por el tejido empresarial y por Galicia, en general. Si no consigue eso, ¿para qué sirve la Confederación de Empresarios?», insiste.

Un candidato de prestigio para la patronal

José Manuel Fernández Alvariño: «Hay que tratar de recuperar el prestigio perdido. Llevamos cuatro años sin un portavoz y con una imagen de desunión. Recuperar esa imagen va a costar. Espero un consenso general en un líder empresarial que nos represente a todos. Ante todo, me gustaría que fuera un empresario significado de Galicia. Galicia tiene magníficos empresarios que están dispuestos a comprometerse y a regir los destinos de la Confederación de Empresarios de Galicia. Es fundamental que nos de la imagen que necesitamos, porque ahora mismo no tenemos imagen. Tenemos la gran suerte de tener un Gobierno estable y tenemos que estar muy bien representados para poder aprovechar esas sinergias. Espero que haya concordia, que haya unión empresarial y que haya un candidato de consenso. Insisto, tiene que ser un buen candidato, no puede ser uno cualquiera o que no tenga representatividad en unos momentos en que es fundamental desarrollar la economía y tenemos una Autonomía con un Gobierno estable.

Antonio Dieter, que coincide con Alvariño en la necesidad de recuperar el prestigio de la institución a través de la unión, difiere en el perfil del candidato: «Puede haber empresarios con grandes empresas que no sean buenos dirigentes de la patronal. La clave es que sea un candidato de consenso y que no haya intrigas que hubo otras veces. Eso es lo fundamental: que se piense en los empresarios y en la institución», concluye.