Globalvia gana una batalla en la guerra por la Autopista del Atlántico
La Corte de Arbitraje de Madrid ratifica su laudo favorable a Globalvia y deshace el acuerdo de Sacyr para vender su 15,5% en Itínere al fondo Corsair
Globalvia vuelve a vencer al fondo Corsair en su guerra por hacerse con el control de la dueña de Audasa. La Corte de Arbitraje de Madrid ha ratificado su laudo favorable al gestor de infraestructuras que anula el pacto de accionistas en el que Sacyr se amparaba para justificar su giro (decidió vender su 15,5% de Itínere a Corsair meses después de haber pactado lo mismo con Globalvia).
De esta forma, el laudo establece que Sacyr debe retrotraer la operación que realizó con Corsair en febrero de 2019 para dar cumplimiento al contrato de venta que firmó en julio de 2018 con Globalvia, que mantiene otra media docena de juicios y arbitrajes a cuenta del control de la dueña de la Autopista del Atlántico.
Los tribunales decantan la balanza
Este laudo arbitral supone una batalla dentro de una guerra judicial que la propia Globalvia prevé que se estire durante al menos otros dos años más. En juego está el movimiento de Sacyr, del que dependerá quién se hace con el bastón de mano en Itínere.
Y es que Sacyr, Abanca, Kutxabank y Liberbank, propietarios del 55% de las acciones de Itínere acordaron su venta a Corsair por 1.300 millones en un pacto del que posteriormente decidió salirse la constructora. La razón, que Corsair se amparó en un derecho de tanteo para deshacer este acuerdo y acordar la compra del 15,5% en manos de Sacyr.
Y es que Corsair depende de esta compra para hacerse con el control total de Itínere, empresa de la que actualmente controla el 38% de sus acciones, frente al 40,1% de Globalvia. Serán los tribunales los que decidan de qué lado se inclina la balanza por el control de la dueña de AP-9.