Galicia coloca seis empresas en el club de los 1.000 millones en ventas
Seis empresas con gran impacto en el empleo y el tejido productivo de Galicia superaron los mil millones de ingresos en el pasado ejercicio
Un puñado de empresas gallegas superó el pasado año los 1.000 millones en ingresos teniendo en Galicia el epicentro, o al menos una parte muy importante, de su estructura productiva y, en consecuencia, generando un gran impacto en el empleo y en el tejido empresarial del territorio.
A las consideradas tradicionalmente compañías tractoras o sistémicas por su enorme generación de valor en las áreas de A Coruña y Vigo, Inditex y PSA Citröen, se han sumado cadenas de distribución alimentaria como Vegalsa y Gadisa, la recuperación de Pescanova y la tozudez de Coren, que finalmente logró superar los 1.000 millones de negocio tras dos años quedándose a las puertas.
Todo ello en un ecosistema donde solamente 155 empresas superan los 50 millones de facturación y donde el volumen de negocio de las 100 mayores supera al de las 20.000 siguientes, según los datos recogidos por el último Informe Ardán correspondientes al ejercicio de 2015.
Inditex. Con un volumen de negocio 25.336 millones en el último ejercicio, la influencia económica de la multinacional de Amancio Ortega convirtió al área de A Coruña en la que más riqueza genera de Galicia, también según el Informe Ardán. Sin Inditex sería difícil explicar el crecimiento y consolidación en la comunidad de proveedores como Aluman, Cándido Hermida, Grupo Caamaño o Jevaso. Según los datos de la compañía que preside Pablo Isla, el año pasado contrató con 7.500 proveedores españoles, que le facturaron 5.117 millones. Abonó en impuestos al fisco español 1.612 millones.
PSA Citröen. El fabricante francés, con plantas en Vigo, Zaragoza y Madrid, ensambla uno de cada tres coches que se producen en España, según los propios datos de la compañía. El año pasado sumó 311.673 matriculaciones, situándose con un 22% de cuota de mercado. La sociedad que integra a las fábricas españolas, Peugeot Citröen Automóviles España, y que destina el grueso de su actividad a la exportación, sumó una cifra de negocio de 5.046 millones. El grupo francés es clave tanto para la industria auxiliar radicada en Vigo como para la actividad del puerto.
Gadisa. Con los supermercados Gadis como buque insignia del grupo, la familia Tojeiro consolida sus negocios en el sector maderero y energético, a través de Reganosa, en 1.270 millones de facturación. La compañía sostiene 7.212 trabajadores, la mayoría radicados en Galicia, por donde se despliega el grueso de sus 262 puntos de venta.
Vegalsa. Algo similar podría decirse de Vegalsa, con una plantilla de 5.900 trabajadores a cierre del último ejercicio, casi todos ubicados en territorio gallego con excepción de los puntos de venta que tiene en Asturias y Castilla y León. El grupo de alimentación alcanzó los 1.048 millones en ventas, según los datos que difundió la empresa.
Coren. Otra empresa importante desde el punto de vista de la generación de valor y el asentamiento de población en el rural. El grupo de base cooperativa de Ourense alcanzó los 1.033 millones de facturación en 2017, destinando un 38% de sus productos a mercados internacionales. Los centros productivos se reparten entre Lugo, Ourense y O Porriño. Tiene una plantilla de 3.240 trabajadores, súbitamente incrementada al acceder a contratar a un millar de falsos autónomos que trabajaban para la empresa y que, según apunta la Inspección de Trabajo, estaban en situación irregular.
Nueva Pescanova. La multinacional de Chapela cerró su último ejercicio con beneficios y con unas ventas de 1.081 millones de euros, según la información remitida por la propia empresa. Era una de las compañías clave de Galicia hasta que en plena crisis económica quebró, destapando prácticas fraudulentas para falsear las cuentas por las que ha sido procesada la antigua cúpula. La empresa surgida del concurso de acreedores está controlada por la banca acreedora.
Los otros grandes grupos
Existen empresas de mayor tamaño en Galicia pero con menor incidencia en el tejido productivo. Pontegadea, el brazo inversor de Amancio Ortega, suma 29.000 millones en activos, pero su actividad se centra en ostentar la participación en Inditex de su fundador y a la compraventa y alquiler de propiedades inmobiliarias en todo el mundo.
Algo similar hace Rosp Corunna, la sociedad de cabecera de Sandra Ortega, con más de 6.000 millones en activos.
Inveravante, de Manuel Jove, tiene 2.500 millones en activos, pero el grueso de su negocio está lejos de Galicia. La empresa está desarrollando su negocio hotelero bajo la marca Attica 21, con dos hoteles y dos apartoteles en la comunidad. Conservaba parques eólicos en territorio gallego, pero los traspasó a Endesa a comienzos de este año.