Galaria, la empresa de servicios del Sergas, supera el Covid y vuelve a ganar dinero

Galaria endereza el rumbo de su cuenta de resultados. La empresa pública de servicios sanitarios encara un 2023 en el que celebra su 15 aniversario tras haber dejado los números rojos en los que se vio inmersa en el año del estallido de la crisis del Covid-19 (2020)..

Así se desprende de la memoria anual que la firma, que tiene al Servizo Galego de Saúde (Sergas) como principal cliente, ha depositado ante el Registro Mercantil de A Coruña. En ellas figura que la firma que capitanea la exconselleira de Sanidade, Rocío Mosquera, despidió el ejercicio 2021 con un beneficio neto por valor de 318.209 euros.

Esta cifra contrasta con los números rojos de 130.154 euros que se había anotado en el año del estallido de la pandemia. Por aquel entonces, la compañía daba cuenta del impacto de la crisis del Covid-19, que, a su juicio, «provocó alteraciones en los niveles de actividad, costes de los procedimientos y cambios organizativos con el fin de garantizar la mejor calidad asistencial «.

La «falta y el encarecimiento de los artículos de protección y los productos de higiene», así como el «aumento en los tiempos de asistencia» tuvieron, según Galaria, «su efecto negativo en los datos económicos y de actividad de Galaria en 2020″. Esta situación tiñó de rojo la cuenta de resultados de Galaria, que, además, se vio privada de repartir el tradicional dividendo que venía abonando a la Xunta de Galicia en calidad de accionista único.

Galaria aumenta ingresos y vaticina más beneficios

El Ejecutivo gallego, a través del Servizo Galego de Saúde, estiró sus subvenciones a Galaria desde los 2,84 registrados en 2020 hasta los 3,81 millones en un 2021 en el que volvió a beneficios. El incremento de estos pagos procedentes del Sergas permitió también que la cifra de negocio total de la empresa pública repuntase desde los 13,89 millones de euros hasta los 15,68 millones en 2021, lo que representa un salto del 12,9%.

De cara tanto a 2022 como a 2023, Galaria espera esquivar los números rojos y aprovechar las bases imponibles negativas de 781.262 euros que ha ido acumulando en los últimos años. «Los activos por impuesto diferido anteriores que fueron registrados en el balance de situación poseen una alta probabilidad de ser recuperados en un futuro», precisa la firma en su memoria anual.

Galaria añade que las «estimaciones de resultados futuros realizadas en las que se prevé retomar la senda de beneficios de los últimos ejercicios tras el paréntesis sufrido por la actual crisis provocada por la pandemia que supuso la propagación del Covid-19, al considerar que la misma tendrá un impacto temporal».

De esta forma, Galaria ve atenuado el impacto del Covid-19 (aunque sigue gestionando el teléfono para llamadas de pacientes con síntomas) y mantiene su actividad en la gestión de las unidades de medicina nuclear, diagnóstico por imagen (resonancias móviles) y radioterapia oncológica. 

Proyecto pionero con medicamentos CAR-T

Además, Galaria inició en 2021 el proyecto de creación de un centro de fabricación propia de medicamentos CAR-T. Se trata de una terapia con células CAR-T con la que se pretende que, mediante modificación genética, las propias células de los pacientes sean capaces de reconocer características específicas de las células cancerígenas para atacarlas.

Para poner en marcha esta iniciativa, Galaria selló un convenio de colaboración con la Consellería de Sanidade, el Sergas y la Universidade de Santiago de Compostela para la puesta en marcha de un centro de fabricación de este tipo de medicamentos, así como unidad mixta de investigación.