Frinsa, la tercera conservera gallega, se lleva a Singapur su central de compras de atún
La compañía, proveedora de marca blanca de grandes grupos como DIA, Lidl o Carrefour, explica que la filial de Singapur se encuentra en fase de evolución para convertirse en la central de compras del grupo
Desde el año 2015, Frinsa desplegó una red de filiales en el exterior para respaldar la internacionalización del grupo que, aunque tiene marca propia y una red de tiendas de conservas gourmet, es conocido por abastecer de marca blanca a grandes grupos de distribución. Una de esas filiales, la de Singapur, «se encuentra actualmente en fase de evolución de cara a convertirse en la central de compras del grupo», explica la compañía con fábricas en Ribeira y Póvoa de Varzim en su Estado de Información No Financiera correspondiente al ejercicio de 2021.
La empresa fundada por Ramiro Carregal añade que, «consciente de sus riesgos y estando el epicentro del mundo del atún en el sudeste asiático, ha continuado con la evolución del negocio de su filial de Singapur, dándole más contenido al proyecto de deslocalización de su función de compras de su materia prima principal».
Frinsa es uno de los grandes comercializadores mundiales de este pescado, concretamente, el séptimo comprador de atún del mundo, procesando anualmente más de 130 toneladas brutas que representan más de 580 millones de latas facturadas. En el sudeste asiático se ubican algunos de los mayores productores mundiales de pescado, como Indonesia, Myanmar o Vietnam.
Una de las filiales que más aporta a los beneficios
La conservera gallega creó en 2015 la filial de Singapur, que fue en el pasado ejercicio la empresa en el exterior más rentable del grupo, con un resultado de 1,9 millones antes de impuestos, según consta en el EINF de la compañía. La cifra de negocio de la sociedad habría superado los 90 millones, mientras que los activos se situarían en los 28 millones, según consta en las cuentas anuales consolidadas de Frinsa.
La empresa de la familia Carregal facturó el año pasado 546 millones, situándose como la tercera mayor conservera gallega por detrás de Jealsa y Calvo. El fundador y presiente, Ramiro Carregal, controla el 64,1% del capital, mientras que el resto está en manos de su hijo y consejero delegado, Jorge Ramiro Carregal Varela. La participación del CEO, un 35,9%, está gestionada a través de una sociedad cartera, Luangwa Valley, que creó el año pasado y cuyo domicilio fiscal está en Madrid, en el Paseo de la Castellana.