Florentino Pérez suma y sigue: A Coruña expedienta a otra filial de ACS
Clece, concesionaria del servicio de ayuda en el hogar por 7,5 millones, se 'olvida' de atender a dependientes y les cambia hasta 17 veces de auxiliar en un mes, según los trabajadores
Va Florentino Pérez de charco en charco en Galicia, donde su grupo es uno de los principales adjudicatarios de los servicios privatizados de los Concellos a través de Urbaser, la filial que gestiona la depuradora de Cabo Prioriño (Ferrol) que no depura, y de Clece, que fue sancionada por el Sergas con 630.797 euros por incumplir el contrato de limpieza en el Complejo Hospitalario Universitario de Santiago.
Clece es una voluminosa filial de ACS, que alcanzó en 2014 una facturación superior a los 1.300 millones de euros con un paquete de contratas públicas en el área de restauración, limpieza de jardines, mantenimiento o servicios sociales. Fue precisamente las deficiencias en este último apartado lo que le costó la apertura de un expediente por parte del Concello de A Coruña.
Expedientes y sanciones
Clece se encarga del servicio de ayuda en el hogar del Consistorio que atiende, según fuentes sindicales, a 700 usuarios y que la empresa del presidente del Real Madrid presta en virtud de un convenio firmado por el gobierno de Carlos Negreira por valor de 7,5 millones a ingresar en tres años. Vence en 2017.
Según Marea Atlántica, dicho convenio ha sido incumplido en reiteradas ocaciones por la filial de ACS, lo que ha provocado la apertura del expediente, que podría derivar en una sanción económica o incluso la rescisión del contrato. Clece fue también expedientada por Compostela Aberta en relación a la gestión de las guarderías en Santiago el año pasado.
Lluvia de denuncias
¿En qué se ha incumplido el convenio? Silvia Cameán, concelleira de Xustiza Social e Coidados, recuerda que en una reunión celebrada en noviembre de 2015 con el director de produción, delegado de Galicia y gerente de servicios sociales de Clece se le pidió a la empresa que corrigiera incumplimientos en materia de plazo de altas, coordinación, rotación de auxiliares y seguimiento del usuario. «Esixiuse da empresa unha reacción inmediata e un cambio radical en canto ao cumprimento das condicións do contrato, concedéndolle un prazo de quince días hábiles para levar a cabo as actuacións correctoras», explica Cameán.
Pero las correcciones no llegaron, para disgusto de los trabajadores, que mes tras mes cursan denuncias ante la inspección de trabajo por temas tan diversos como los cuadrantes horarios, cambios irregulares de turno, horas extra mal abonadas, vacaciones, descanso insuficiente del personal…
Usuarios sin servicio
CIG, con representación en el comité de empresa junto a UGT y CC.OO., explica que personas dependientes se quedan con frecuencia sin atención debido a la descordinación del servicio, que provoca que no se presente nadie en la casa. Recuerda la central que los seis coordinadores que existían en la empresa dejaron el puesto exhaustos ya que «se los utilizaba para todo, incluida la elaboración de las nóminas».
La jornada laboral se parte en tres tramos cuando el convenio sólo permite dos y los trabajadores de fin de semana trabajan los días laborables bajo «amenazas», según el sindicato. Este dinamismo en los horarios no consigue una atención mejorada para las personas dependientes receptoras del servicio, que acumulan hasta «17 auxiliares» distintos en «un mes».
CIG prosigue enumerando problemas. Los descansos entre días, mínimo de 12 horas, se incumplen, los días de asuntos propios acabaron en la Inspección de Trabajo, al igual que las vacaciones, que costarán a Clece otro conflicto colectivo según anunciaron los sindicatos.
Nueva reunión
Cameán, que no quiso entrar en la acumulación de sanciones de Clece y de las filiales de ACS en Galicia, insiste en que «no van a tolerar abusos nin incumprimentos». «As persoas con dependencia deste Concello vannos atopar do seu lado defendendo os seus dereitos, porque esta é a nosa obriga, para isto nos puxo aquí a xente. Pero tamén defenderemos as súas traballadoras e por iso reiteramos a esixencia de que recoñezan o convenio colectivo dos pregos, que aboen as horas extraordinarias ao prezo legal e que coiden das súas traballadoras. Entendemos que non se pode buscar beneficios a costa de recortar salarios, dereitos e calidade nun servizo que coida de persoas», concluyó.
Este medio intentó contactar este martes con Clece sin conseguirlo. Representantes del Concello, con Cameán al frente, y del comité de empresa se reúnen este miércoles para abordar la situación del servicio.