Ferroglobe recorta su beneficio a una décima parte en pleno ‘apagón’ en España
La dueña de Ferroatlántica ha recortado su beneficio neto hasta los siete millones de euros en el primer trimestre tras haber logrado unas ganancias récord el año pasado
Ferroglobe se salva de los números rojos pese al recorte de ventas. La matriz de Ferroatlántica presentó a última hora del martes los resultados correspondientes al primer trimestre del año. En ellos se refleja un descenso de sus beneficios hasta representar una décima parte respecto a los alcanzados en los tres meses anteriores.
En concreto, Ferroglobe ha pasado de ganar 75,9 millones de dólares (unos 69 millones de euros al cambio actual) entre octubre y diciembre a reducir esta cifra hasta los 7,8 millones de dólares (7,1 millones de euros) en los meses de enero a marzo. Este descenso del 90% se eleva hasta el 95% si se compara con el mismo periodo del año anterior. Y es que Ferroglobe se había embolsado 165,3 millones de dólares (151 millones de euros) en el trimestre inaugural de un 2022 en el que logró unas ganancias históricas de 572,6 millones de dólares (523 millones de euros).
La firma que capitanea Javier López Madrid se ha visto lastrada por el recorte de ventas que ha paralizado Sabón. En concreto, la compañía pactó a finales del año pasado un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) por razones «organizativas y productivas» ante la caída de la demanda de, por ejemplo, el silicio metal. Con los hornos en Galicia apagados desde el pasado verano, la compañía ha decidido detener también la actividad en el único horno que permanecía en operación en España. Se trata del de su fábrica de Cantabria, que tras su reinicio a comienzos de año, fue apagado hasta nuevo aviso la semana pasada.
Los desafíos de Ferroglobe
Esta bajada en el ritmo de pedidos se hace notar en una cifra de negocio que descendió desde los 715,3 millones de dólares del primer trimestre de 2022 a los 400,9 millones del mismo periodo de 2023. «Tal y como hablábamos en la presentación de resultados del cuarto trimestre [de 2022], el mercado se ha debilitado en el primer trimestre y creemos que actualmente se encuentra en niveles mínimos. Las condiciones económicas globales siguen desafiantes con precios generales débiles y demanda débil. Esperamos alguna mejora en el segundo trimestre, continuando en la segunda mitad, en línea con nuestras estimaciones para 2023″, ha destacado su consejero delegado, Marco Levi.
«Aunque el entorno macroeconómico es desafiante, lo estamos gestionando de manera exitosa y centrándonos en el posicionamiento de la compañía para su éxito a largo plazo», ha destacado el ejecutivo, que prevé que la firma cierre el año con un ebitda ajustado de entre 270 y 300 millones de dólares.
El ejecutivo también ha puesto en valor que la deuda neta ha caído a mínimos históricos y que el objetivo de la multinacional pasa por conseguir hacerse con una posición neta de caja «en un par de trimestres».