La plantilla de Ferroatlántica abre la batalla legal contra la venta de las centrales
El comité de empresa de Ferroatlántica en Cee-Dumbría ha decidido pasar a la acción ante el inmovilismo de la Xunta. Este martes han presentado un informe jurídico, encargado al profesor de Derecho Administrativo de la Universidade da Coruña Carlos Aymerich, que viene a refrendar sus argumentos para oponerse a la venta de las centrales hidroeléctricas de los ríos Xallas y Grande y, por tanto, a la segregación de los activos de generación energética de las fábricas de ferroaleaciones de la Costa da Morte.
El propio Carlos Aymerich fue el encargado de apuntar algunas de las conclusiones del documento, que se podrían resumir en que «sería totalmente contrario a derecho» la venta de las centrales sin meter en el paquete las factorías de ferroaleaciones. No obstante, apunta, la Xunta tendría que autorizar previamente la operación y, en caso de hacerlo, esta decisión «sería nula de pleno derecho, inválida e, incluso, el funcionario que la dictase podría estar incurriendo en un delito de prevaricación administrativa».
En este sentido, el titular de Derecho Administrativo de la UDC explica que el interés público, en materia de empleo y actividad, «es la propia causa de que Ferroatlántica sea la concesionaria de esos aprovechamientos» por tanto, desvinculando ambas actividades «desaparecería la causa de la concesión», lo que implicaría extinguirla, revertir gratuitamente las instalaciones a la administración hidráulica gallega e iniciar un nuevo procedimiento de otorgamiento, que se debería realizar en régimen de concurrencia.
En ese supuesto, Ferroatlántica solo tendría derecho a percibir una compensación por las obras realizadas y no amortizadas. Sin embargo, no podría reclamar ni daños y perjuicios, ni una indemnización por lucro cesante de las concesiones.
En caso de extinción de la concesión, Ferroatlántica solo tendría derecho a percibir una compensación por las obras realizadas y no amortizadas.
Los miembros del comité de empresa de los saltos y de las plantas de Cee y Dumbría, que arroparon a Aymerich en la presentación, agradecieron al ex diputado del BNG su colaboración «desinteresada» y explicaron que este documento servirá como punto de partida ante una posible batalla legal en caso de que Juan Miguel Villar Mir siga adelante con sus aspiraciones de vender las centrales españolas del grupo.
También lo ven como una herramienta de presión y un argumento más para ser recibidos por el conselleiro de Industria, Francisco Conde, al que ya le solicitaron un encuentro por el que todavía siguen esperando. La Xunta de Galicia, apuntan, debería emitir su propio informe, aunque el presidente Alberto Núñez Feijóo anunció que no se pronunciaría hasta que la empresa notificase sus intenciones. «Nosotros no nos vamos a quedar de brazos cruzados. Hemos hecho la parte que nos corresponde; esperemos que ellos (por la Xunta) también», concluyen.