Zegona se irá de compras por Europa con el botín logrado con Euskaltel
El fondo británico celebra su apuesta con premio con Euskaltel y dedicará parte de los 430 millones que logrará con la opa a comprar otra teleco europea para aprovechar ante lo que consideran una oportunidad de mercado
Cambio de ciclo en Zegona tras la opa de MásMóvil a Euskaltel. El fondo británico, que desde hace prácticamente dos años ejercía como principal accionista de la dueña de la gallega R da por cerrada su etapa en España y abre la puerta a repetir inversiones como la realizada en Euskaltel en otros países europeos.
«Una vez que abandonemos España, continuaremos ejecutando nuestra estrategia buy-fix-sell [comprar-arreglar-vender] en el sector europeo de las telecomunicaciones. Nos enfocaremos en negocios que requieran cambios activos para extraer todo el valor, creando retornos a largo plazo a través de mejores fundamentales en los negocios», asegura Zegona en su memoria anual.
La compañía, que dio carpetazo al año 2020 con un desplome del 67% en sus beneficios (bajaron de los 42,1 millones de euros cosechados en 2019 a 14 millones) considera que hay un «entorno saludable para inversiones en el sector de las telecomunicaciones en Europa. El mercado es grande y fragmentado, con bastantes más de 100 operadores, de los que más de la mitad se ajustan al tamaño de inversión que estamos buscando. Estamos viendo un incremento en la actividad compradora y mayor disponibilidad de activos», recalca la firma capitaneada por Eamonn O’Hare.
Más de 400 millones tras su golpe de timón
Desde Zegona, que se embolsará cerca de 430 millones de euros con la opa de MásMóvil (su oferta valora a Euskaltel en 2.000 millones de euros) defienden que la estrategia que seguirán en sus próximas inversiones en Europa seguirán la estela de lo realizado con el grupo vasco. El fondo cifra en 40 millones de euros las sinergias generadas con la vuelta de tuerca que la compañía ha dado a nivel organizativo. Entre las medidas citan la integración de tres compañías en un mismo negocio (por Euskaltel, R y Telecable, estas dos últimas fueron fusionadas el año pasado), una atención al cliente orientada a resultados, una mejora de las TIC y la cancelación de los derechos audiovisuales de fútbol, que consideran no rentables.
A esta batería de medidas que, entre otras cosas, se ha saldado con la fusión de R y Telecable, decenas de despidos y el traslado de un reguero de subcontratas en torno a Asturias o País Vasco, la compañía se refiere también a la expansión nacional del grupo como uno de sus principales legados.
Las tarifas agresivas de Virgin Telco
Euskaltel lanzó definitivamente al mercado en 2020 la filial Virgin Telco, con la que pretendía abrirse paso fuera de Galicia, Asturias y País Vasco, sus mercados naturales. Virgin Telco ha logrado superar la barrera de los 100.000 clientes y prosigue con su expansión por los hogares españoles gracias a unas tarifas agresivas que dejan en caja menos de la mitad de ingresos que Euskaltel, R y Telecable.
Y es que la marca escogida a nivel estatal ha logrado una facturación de 105 millones de euros en este trimestre a través de sus 101.000 clientes. Se trata de unos ingresos medios de 104 euros en el trimestre, lejos de los 219 que el grupo obtiene a través de sus otras tres marcas. Según detalla Euskaltel en los resultados de enero a marzo que remitió a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) este miércoles, las ventas totales excluyendo a Virgin Telco ascendieron hasta los 163,7 millones de euros sobre una base de 746.000 clientes, lo que deja unos ingresos medios en caja de 219 para este periodo de tres meses.