Euskaltel ignora la ofensiva de Zegona y aspira al millón de hogares
El grupo en el que se integra la operadora R ve un horizonte "ilusionante" para la compañía, que reforzará su "solidez y estabilidad"
Euskaltel mira para otro lado ante la ofensiva de la británica Zegona y al futuro más próximo para crecer. El presidente del grupo en el que se integra la cablera R, Alberto García Erauzkin, ha destacado la confianza de accionistas e inversores en Euskaltel, un proyecto «con un horizonte a la par ilusionante y retador» en el que, «desde el crecimiento», el grupo «reforzará su solidez y su estabilidad». Estas manifestaciones han sido realizadas por García Erauzkin en el transcurso de la Junta de Euskaltel, en la que los accionistas han aprobado con más de un 92% de los votos las cuentas anuales del pasado ejercicio, el informe de gestión y el resto de las propuestas incluidas en el orden del día.
La junta, con un quorum del 68,7%, se ha celebrado en pleno proceso por parte de Zegona para convertirse, a través de la compra de acciones en el mercado, en el primer accionista de la compañía, superando al actual, Kutxabank, un tema al que no se ha hecho ninguna mención.
En su discurso ante la junta, en la que no ha intervenido ningún accionista, García Erauzkin, que ha subrayado la «grandeza» de Euskaltel, ha indicado que «todos los logros conseguidos y los retos asumidos» son fruto de un «equipo comprometido, sostenido en la confianza de nuestros accionistas e inversores».
Nuevas áreas de expansión
Además, ha destacado la expansión iniciada paralelamente en Navarra, León, La Rioja, Cantabria y Cataluña. «El crecimiento hacia nuevos mercados, potenciando al mismo tiempo nuestra presencia en los mercados tradicionales, nos permitirá seguir creciendo tanto en resultados como en nuestra base de clientes, cumpliendo con los compromisos adquiridos ante nuestros grupos de interés», ha dicho.
Por su parte, el CEO de Euskaltel, Franciso Arteche, ha destacado el «gran horizonte» de Euskaltel, tras un 2018 en el que han empezado a «asentar las bases» no solo para ser el operador «líder» del norte de España, sino uno de los «principales operadores de España con cobertura en todo el país«.
La transformación
Según ha manifestado, 2018 ha sido un año de «la transformación» y ha afirmado que, gracias a la estrategia de negocio (2018-2022), los pasos de Euskaltel son «cada vez más firmes» y están preparados para «hacer frente a los retos del sector con un gran potencial y crecimiento a futuro».
Tras subrayar que cuentan con un modelo de negocio que «funciona, da garantías y demuestra una gran solidez financiera», ha indicado que para seguir avanzando tienen que ser capaces de «mantenerse en esta línea» y apostar «por cambiar los puntos en los que hay áreas de mejora». El CEO de Euskaltel ha precisado que, dentro de la estrategia del operador, 2018 y 2019 se definían como «años de transición» para poner en marcha medidas para «coger velocidad de crucero». Según ha indicado, están «a medio camino» pero «a buen ritmo» y ha subrayado que, a pesar de ser un año de «transición», han logrado un crecimiento del 11,2% de facturación y un beneficio neto de casi 63 millones, un 26,6% más.
Resultados y retos
Además, se logró un ebitda de 336,4 millones, un 9,6% más y Arteche ha indicado que, pese al aumento esperado de los gastos relacionados con los planes de expansión e integración, Euskaltel ha crecido un 24% en su capacidad de generación de flujo libre de caja hasta alcanzar los 124 millones, lo que supone casi el 18% de los ingresos. Asimismo, según ha apuntado, han seguido reduciendo la deuda, que se sitúa por debajo de 4,5 veces el ebitda.
Arteche ha afirmado que tienen confianza para acometer esta transformación con «seguridad financiera», una transformación basada en cinco pilares que les permitirán hacer frente a «los retos futuros» y les darán «estructura para ser muy competitivos a medio y largo plazo».
Uno de esos pilares es el de la expansión y ha señalado que se comenzó la «andadura» en Navarra, un «paso crucial para validar el modelo» en el resto de mercados y les ha dado «la llave de los próximos pasos a seguir». Arteche ha recordado que el objetivo es llegar a más de un millón de hogares en 2019 y que estos nuevos mercados supongan el 8% de la facturación en 2022.
Además de este pilar, ha citado otros como el de la simplificación, con unas mejoras en eficiencias que generarán más de 43 millones de euros anuales en 2022, la mejor experiencia de usuario, el crecimiento en el sector empresas y las personas.
El objetivo de cara a 2019 es «ir ganando tracción» a lo largo del año y «mejorando el rendimiento cada trimestre». Además, ha recordado que su plan de negocio hasta 2022, con el que están «respondiendo a la confianza de los accionistas», prevé un dividendo creciente a doble dígito y la reducción de la deuda neta por debajo de 3,5 veces ebitda. El reto es alcanzar los 800 millones de facturación en cuatro años y los 400 millones en ebitda para 2022.
La guerra del fútbol
Arteche ha hecho también un análisis del mercado y ha subrayado que se está en una época «muy competitiva» y no cree que cambie en el «corto plazo». Según ha indicado, en 2018 el verano fue una época «especialmente difícil» con «la guerra del fútbol» y unos «descuentos muy agresivos en precios» por parte de todos sus competidores. «Espero que, por el bien del mercado, no se repita», ha añadido.
No obstante, ha asegurado que, pese ser el año «más duro» desde el punto de vista competitivo, 2018 ha sido un «buen año» y ha destacado que cuentan con «armas y herramientas» para que el futuro sea «prometedor».
La junta ha aprobado las cuentas anuales del ejercicio 2018 y la propuesta de distribución del dividendo. El dividendo final que se distribuirá es de 31 céntimos de euro por acción, lo que implica una rentabilidad del 4,2% ponderado sobre el precio medio de la acción en 2018 y un 11,5% más que el abonado hace un año.
Los acuerdos
El consejo de administración de Euskaltel aprobó en octubre de 2018 la distribución entre los accionistas de un dividendo a cuenta de los resultados de 2018 de 0,14 euros brutos por cada acción en circulación con derecho a percibirlo, que se hizo efectivo el pasado 7 de febrero de 2019.
Posteriormente, acordó someter a la junta de accionistas la aprobación de un dividendo complementario de 0,17 euros por acción, cuyo pago será efectivo en la fecha que determinará el consejo de administración en una próxima reunión.