Euskaltel garantiza que R mantendrá la sede social y fiscal en A Coruña
La compañía gallega mantendrá también las estructuras locales y los equipos de gestión tras la integración
Cuando R y Euskaltel firmaron el acuerdo de integración el pasado mes de julio, se comprometieron a mantener el carácter local de ambas compañías. Se conservarían las marcas, las estructuras locales y los equipos de gestión que, según reconocían entonces en un comunicado, son «elementos clave del éxito durante los últimos años». Sin embargo, quedaba la duda de qué pasaría con las sedes. Tampoco se van a mover. R mantendrá su sede fiscal en A Coruña y seguirá pagando impuestos en Galicia.
Desde la empresa vasca confirman a Economía Digital que el acuerdo «no contempla» el desplazamiento de sedes fiscales, ni tampoco «la afección de impuestos pagados en cada territorio». En este sentido, inciden en que las ventajas de la integración «no tienen nada que ver» con esta cuestión, sino más bien con la consolidación de un gran grupo de cable en el norte peninsular con las sinergias y capacidad de crecimiento que pueda generar. De esta manera, R actuaría como una filial de Euskaltel, controlada totalmente por esta y manteniendo como hasta ahora su sede fiscal.
Los actuales accionistas de la firma gallega -el fondo británico CVC y Abanca- percibirán por la operación 600 millones de euros en metálico, de los que 180 serían para Abanca y 420 para CVC. El resto, se repartiría en acciones. En total, ambos controlarán el 17% de la compañía resultante.
Compañías semejantes
R y Euskaltel suman un red de más de 715.000 clientes entre residenciales y empresas, unos ingresoso de pro forma de 570 millones de euros y un Ebitda de 265 millones de euros, Su red se extendería a lo largo de 725.000 kilómetros en dos territorios en los que están profundamente arraigadas y que suman un mercado de aproximadamente cinco millones de habitantes.
Aunque no son iguales, R y Euskaltel son dos empresas con una valoración similar. El acuerdo fija el precio de la operadora gallega en 1.155 millones – resultado de multiplicar por 10.9 el ebitda previsto para 2015 – solo semanas después de que Euskaltel empezase a cotizar en Bolsa con una valoración inicial de 1.200 millones de euros. El propio documento remitido por Euskaltel a la CNMV comunicando el principio de acuerdo incide en esta idea: «comparten múltiples similitudes y afinidades a nivel cultural y de estrategia de negocio que garantizan una exitosa ejecución de un plan de negocio conjunto a futuro».
Unión positiva
En otro documento posterior, remitido al regulador el 28 de julio, la compañía vasca destaca algunos aspectos de la integración, como el aumento de tamaño, relevancia en el mercado nacional o su fortaleza en las dos regiones de origen, lo que sumado a las sinergias que pueda generar la operación otorga a la empresa resultante una valoración mucho más atractiva.
Antes de notificarse el acuerdo, los títulos de Euskaltel se situaban en el entorno de los 10 euros. En las semanas posteriores alcanzaron los 11,60 euros. Al cierre de la sesión de este jueves su valor era de 10,3 euros. Las partes siguen ultimando algunos «flecos», como por ejemplo que se concrete un préstamo de 900 millones de euros solicitado por Euskaltel a varias entidades para cerrar la operación.