Endesa prepara el cierre o la venta de su otra central de As Pontes

Enel, el grupo propietario de Endesa, acelera su plan de descarbonización con el objetivo de conseguir operar con cero emisiones a partir de 2040. La meta fijada por la compañía italiana supone el abandono del carbón en 2027, poniendo fin a la actividad de sus centrales térmicas en caso de que continuaran operativas. En España lleva en marcha ese proceso desde años atrás, lo que supondrá el próximo cierre de las instalaciones de As Pontes, ahora reactivadas por la crisis energética.

Pero Enel también marca como objetivo estratégico el abandono del negocio del gas en 2040, una década antes de lo fijado por la estrategia de la Unión Europea. El punto y final de la generación con gas obligará forzosamente a vender o cerrar su otra central de As Pontes, la de ciclo combinado, en ese plazo.

Junto a la central gallega, deberá hacer lo mismo con otra en Cataluña y dos en Andalucía.

Adiós al ciclo combinado y al suministro de gas a clientes

La central tiene 850 megavatios de potencia instalada y consume gas natural que llega a través de un gasoducto que enlaza con la regasificadora de Mugardos, en el puerto de Ferrol. En 2020, Endesa invirtió 30 millones en actualizar el equipamiento, aunque hasta 2040 y en un escenario global de abandono de las emisiones, lo más probable es que acabe cerrándose y no vendiéndose.

Además de las centrales de ciclo combinado, el abandono del gas también implica dejar el suministro para clientes particulares y empresas. Endesa es el segundo operador después de Naturgy en el mercado español.