Endesa ‘pasa’ de la Xunta: activa el concurso para desmantelar As Pontes
La compañía eléctrica lanza el concurso para el desmantelamiento, que durará cuatro años, a pesar de que la conversación con las administraciones acerca de la viabilidad de los biocombustibles sigue en activo
Endesa desatiende por enésima vez a la Xunta de Galicia y lanza el concurso para adjudicar el desmantelamiento de la central de As Pontes, un proceso que durará cuatro años. En un escenario en el que las conversaciones entre empresa y administración acerca de la viabilidad de los biocombustibles continúan en activo, la compañía eléctrica espera poder comenzar a deconstruir la planta a principios de julio de este año, una vez le sea otorgada la autorización por parte del Ministerio de Transición Ecológica.
El lanzamiento se conoce unos días después de la última reunión con la Xunta, que junto al Gobierno central defendieron un estudio que afirmaba que la viabilidad de la central coruñesa es posible desde el punto de vista económico si se emplea una mezcla de carbón con otros productos. Endesa rebatió este documento con uno propio y se acordó fijar otra reunión la semana siguiente para «sacar conclusiones».
Sin embargo, dicha reunión, que debió haberse celebrado la semana pasada, «nunca se convocó», según afirman fuentes sindicales de la CIG. «El proceso va muy lento. No nos pilla por sorpresa, Endesa prevé que le concedan el cierre definitivo a finales de junio, así que pensábamos que ya se habría ofertado el concurso de desmantelamiento, aunque las conversaciones con la Xunta siguiesen en marcha», comentaron desde el sindicato.
«Dos procesos en paralelo»
Desde Endesa aseguran que el concurso para adjudicar el desmantelamiento transcurre en paralelo a la decisión que se adopte con las administraciones respecto a la viabilidad de los combustibles alternativos. «Si se aprueba lo de los biocombustibles, cosa que no estimamos probable porque ya hemos explicado que no es viable, se verá qué hacer. Endesa está trabajando en el desmantelamiento porque hay muchos afectados, se trata de lograr la empatía de las autoridades y ganar tiempo«, han apuntado.
El lanzamiento del concurso forma parte del paquete de promesas que la empresa hizo a los trabajadores de la Asociación de Transportistas del Carbón de As Pontes (ATCAP), que bloquearon la entrada a la central en una protesta la semana pasada. Dichas promesas incluyen que «en caso de que se realice el desmantelamiento de la central», serán ellos los encargados de transportar los residuos generados.
El ejemplo de Compostilla
La compañía que dirige José Bogas planea desmantelar la central por sectores, con el fin de aprovechar el equipamiento y elementos que componen las centrales en proceso de cierre (Compostilla, Teruel, As Pontes y Litoral) para su reutilización en otros centros de generación del grupo o para la venta a terceros.
En el caso de Compostilla, la adjudicación del desmantelamiento se la llevó la portuguesa Recifemetal, que se comprometió a contratar al 80% del personal requerido de la zona de influencia. Se espera que el proceso en As Pontes sea similar, ya que Endesa priorizará a las compañías que cumplan este modus operandi de contratación.