El verdadero gol de Piqué: vincula su sicav al mayor fondo del mundo

Tras el Gerard Piqué futbolista se esconde un hombre de negocios. Videojuegos, restauración e inversiones inmobiliarias son algunas de las aventuras empresariales del futbolista del FC Barcelona, que también se beneficia de los incentivos fiscales que ofrecen las sicav. A través de Kerad 3 Invest reparte sus intereses por vehículos de inversión de medio mundo. Uno sobresale por encima del resto: Black Rock International, el mayor fondo del planeta.

La compañía participada en el 86,88% por el jugador –legalmente debe tener más de 100 socios— y gestionada por el banco suizo UBS creció al ritmo del 4,22% en 2017 y engordó desde los 13,37 millones de euros hasta los 13,93 millones. El salto llegó propiciado por las inversiones en fondos y gestoras de activos, en su mayor parte de carácter internacional.

El activo estrella de Piqué es la participación que posee de Black Rock. Al cierre del ejercicio, disfrutaba de 1,25 millones de euros en participaciones de la firma estadounidense, uno de los reyes del Ibex 35. Vistos los buenos resultados, la sicav incrementó su inversión en el fondo: en 2015 poseía apenas 308.000 euros, que ya elevó a 640.000 euros en 2016.

Black Rock suma activos por valor de 18.500 millones de euros sólo en España

Así, el futbolista se beneficia del crecimiento del vehículo americano, con unos activos de 5,9 billones de dólares (4,77 billones de euros al cambio actual) alrededor del planeta y participación en más de la mitad de las 35 cotizadas del selectivo español. La presencia podría ser incluso mayor, pues sólo está obligado a hacerla pública cuando supera el 3% del capital.

Con un valor de 18.500 millones de euros, Black Rock presume de acciones de Telefónica, Grifols, Amadeus, Mediaset, DIA, BBVA, Bankinter, Ferrovial, Enagás, Caixabank, Abertis, Banc Sabadell, Banco Santander, Cellnex, ACS, IAG, Iberdrola, Repsol y Merlin.

Pero además de la apuesta por el fondo estadounidense, la Kerad 3 Invest también cuenta con una participación de 800.000 euros en el británico M&G Investments, 753.000 euros en el alemán DWS Investments, 666.000 euros en JP Morgan o 490.000 euros en el fondo escandinavo Nordea. Así hasta 10,64 millones repartidos en gestoras de alrededor del planeta.

Piqué apenas movió dinero en el Ibex 35: sólo Mediaset, Telefónica e Iberdrola

No obstante, el futbolista diversifica y suma otros intereses empresariales entre las inversiones, aunque de menor tamaño. Y el sector ferroviario parece ser de su atractivo. Luce 215.000 euros en bonos de la lusa Comboios de Portugal, 90.000 euros en bonos de Bombardier y 113.000 euros en bonos de Red Ferroviaria.

Dentro del Ibex, sólo se deja llevar por los bonos de Mediaset (107.000 euros). A lo largo de 2017, optó por liquidar sus activos en Telefónica (227.000 euros) e Iberdrola (104.000 euros).

La tercera rama de las inversiones del deportista son los productos derivados, cuyo valor depende del devenir de los activos. Aquí, el joven catalán se encomienda a los Estados Unidos con 380.000 euros en el mercado de futuros del dólar y 321.000 euros de opciones del índice S&P 500.

Piqué no entraría en la Champions League de la inversión: invertir en el Ibex es mucho más rentable

Sin embargo, el futbolista no entraría tan siquiera en la Champions League de la inversión a pesar del enrevesado entramado de inversiones. De hecho, una persona que simplemente hubiera vinculado su capital a la cotización del Ibex 35 hubiera obtenido en 2017 una rentabilidad del 7,4%, tres puntos más que la del deportista. La diferencia se produce a pesar de las caídas de noviembre (-2,97%) y diciembre (-1,67%), meses marcados por la inestabilidad política derivada del conflicto independentista en Cataluña.

Fuera de la Península Ibérica, la bolsa alemana creció el 12%, la francesa el 9,5% y la británica el 7%. El Eurostoxx, que agrupa los principales valores del Viejo Continente, subió al ritmo del 6%.

Gerard Piqué: ¿por qué una sicav?

Desde su nacimiento, las sicav se han visto envueltas por la polémica al ser consideradas por ciertos sectores como una herramienta de elusión de impuestos para ricos. Tras la exigencia de contar con un centenar de socios, en muchas ocasiones se esconden testaferros y hombres de paja que simplemente son números para ayudar a una gran fortuna –en este caso sería la de Gerard Piqué– a poder beneficiarse de su baja fiscalidad.

Cuando el dinero está en una empresa de este tipo tributa bajo un 1% de Impuesto de Sociedades, en lugar del 30% correspondiente. Cuando el capital retorna al dueño, las plusvalías pagan los mismos impuestos que unas acciones, entre el 21% y el 27%, al considerarse que se trata de capital y no de beneficios logrados por una inversión.