Más madera al fuego de la AP-9. El Valedor do Pobo insiste en que Audasa «debe levantar las barreras» de los peajes de la AP-9 «en caso de retenciones importantes», ya que, según considera la institución dirigida por Milagros Otero, el servicio en una autopista de pago «tiene que ser óptimo de forma permanente».
«El desarrollo de obras perjudiciales para el servicio debería ir acompañado de medidas compensatorias a los usuarios que ven aumentados los tiempos en sus desplazamientos», ha manifestado el órgano. Y es que, según ha informado este jueves en un comunicado, la Valedoría ha concluido su queja de oficio, abierta en primavera de 2017, al producirse los atascos en el tramo entre Pontevedra y Vigo «a causa de las obras realizadas en la vía».
Estas dos actuaciones, tramitadas entre 2017 y 2018, han sido remitidas a la Fiscalía Provincial de Pontevedra a petición de este órgano judicial, que prevé emprender acciones civiles por los prejuicios ocasionados. Así, Milagros Otero ha informado de que, además de las actuaciones de oficio, tramitó quejas individuales por el mismo asunto, por lo que asegura que los afectados «pueden dirigirse a la Fiscalía».
El ninguneo de Audasa
En palabras de la valedora, las retenciones son «problemas que se ocasionan de forma continuada» en la AP-9 y que «no recibieron una respuesta adecuada por la concesionaria y por la administración competente». «Igual que ocurrió en 2017, los responsables de la autopista no abrieron las barreras como una consecuencia lógica de reacción ante la imposibilidad de mantener un servicio adecuado en una vía de pago», censura la institución, al tiempo que afirma que se «dirigió de nuevo» a Audasa, sin obtener respuesta alguna.
Además, según ha indicado la Valedoría, se ha solicitado también un informe a la Delegación del Gobierno en Galicia, pero ve que «el contrato de concesión no contempla en ningún caso la supresión o rebaja del peaje, y en particular durante la ejecución de obras».