El Supremo tumba la ofensiva de Frinsa contra una empresa de Vilagarcía por plagio
El Tribunal Supremo decide no admitir a trámite el recurso por el que Frinsa acusaba a La Riviere Berberechos de infringir los derechos de su marca Ribeira
Frinsa vuelve a claudicar en el Tribunal Supremo por el lío de marcas. Tras naufragar en su ofensiva contra las conserveras Braulio Alfageme y Frisla, la compañía dirigida por Ramiro Jorge Carregal Varela ve ahora como el Alto Tribunal ha cortado su movimiento en los juzgados para anular la marca de La Riviere Berberechos.
Y es que el Tribunal Supremo ha decidido desestimar el recurso de casación presentado por Frinsa contra esta última empresa que asienta su base de operaciones en Vilagarcía de Arousa. En concreto, la histórica conservera, que cuenta con una facturación cercana a los 550 millones de euros, entendía que se le estaban infringiendo sus derechos marcarios sobre su marca propia más icónica.
De Ribeira a La Riviere
Se trata de Ribeira, paraguas bajo el cual Frinsa ofrece un catálogo de productos que van desde las conservas de atún o mejillones hasta los berberechos o los calamares, pasando por los filetes de cabella. La compañía con sede en A Pobra do Caramiñal entendía que sus derechos de marca estaban siendo vulnerados por La Riviere y sus conservas de berberechos, mejillones, navajas o almejas.
Sin embargo, después de que la Audiencia Provincial de Alicante fallase en favor de La Riviere Berberechos en diciembre del año 2018, es ahora el propio Supremo el que corta el recorrido judicial para Frinsa. El Alto Tribunal se basa en un defecto de forma del recurso de casación para inadmitirlo a trámite. «Se incumplen los requisitos de estructura del recurso, al no articularse en motivos y no citar el precepto o preceptos infringidos en el encabezamiento», alega, antes de referirse a la «inexistencia de interés casacional» de la causa.
«Tal conclusión se desprende tras analizar la falta de identidad fonética, la ausencia de identidad gráfica y
la inexistencia de identidad conceptual«, concluye el Tribunal Supremo tras realizar la comparativa entre ambas marcas.
Otra derrota por el ‘choque’ de marcas
Frinsa vuelve a naufragar en su ofensiva por anular marcas rivales como ya le ha ocurrido en otras ocasiones a lo largo de estos últimos años. La Sala de lo Contencioso del Tribunal Superior de Justicia de Madrid desestimó a mediados de 2019 el recurso que la conservera de A Pobra do Caramiñal presentó contra Conservas Cermar y su marca Frisla. «No hay riesgo de confusión pues, como dice la resolución de la Oficina, las sílabas que componen los signos son diferentes, lo que les dota de una fonética diferenciada”, concluía el juez.
El Tribunal Superior de Justicia de Madrid volvió a fallar en contra de los intereses de Frinsa a cuenta del lío de marcas en torno a sus tiendas gourmet La Conservera. En concreto, el tribunal desestimó la demanda de la firma de Ramiro Jorge Carregal contra la inscripción de las marcas La Conserva by Braulio Alfageme y La Conserva by Braulio, registradas por la empresa cántabra Dando La Lata Premium.
La Sala concluyó que, “pese a coincidir en parte los signos enfrentados en los vocablos”, estos “no se pueden considerar como los más distintivos pues son meramente descriptivos de los productos solicitados, mientras que los otros vocablos de la marca impugnada son claramente diferentes de los de los signos prioritarios y debemos considerarlos como los más distintivos”, entendiendo así que Braulio Alfageme y Braulio se erigen como elementos lo suficientemente distintivos de la marca y la hacen perfectamente diferenciada de La Conservera de Frinsa.