El sinvivir de Copasa: nuevo retraso del AVE a La Meca
El consorcio del AVE a La Meca, en el que participa Copasa, teme un nuevo retraso ante la demora de las estaciones que construyen otras empresas
Es un sinvivir, en justa proporción a su dimensión y el reto que conlleva su ejecución. Pero hay problemas añadidos. El consorcio español encargado de la construcción y explotación del AVE La Meca-Medina, en el que se integra la ourensana Copasa, teme no poder comenzar a prestar servicio en marzo de 2018, tal como está previsto, por causas ajenas al grupo que derivan de los retrasos que acumulan tres de las cinco estaciones del corredor que construyen otras compañías locales.
En concreto, se trata de las estaciones de La Meca, Jeddah y la que conecta con el aeropuerto, según confirman en fuentes del consorcio español. La demora que acumulan las constructoras encargadas de su ejecución, las saudíes Oger y Binladin, es el factor que actualmente está haciendo peligrar el último acuerdo que el consorcio español alcanzó con el promotor del AVE, la Saudi Railway Organization (SAR) para poner en explotación comercial el ‘Ave del Desierto’ en marzo de 2018.
Viajes «demostración»
No obstante, la coyuntura de las obras de construcción de estos recintos no impedirá que el AVE a La Meca comience a realizar sus anunciados ‘viajes de demostración’ antes de fin de año. Para ello, se habilitará una determinada zona en los recintos de las estaciones. Se trata de viajes en los que no se transportarán viajeros, sino distintos tipos de invitados por el consorcio con el fin de mostrarles la infraestructura y su servicio. Supondrá la circulación de dos trenes por sentido cada viernes y cada sábado desde las ciudades de La Meca y Medina.
El AVE La Meca-Medina figura como uno de los mayores contratos logrados en el exterior por empresas españolas. El proyecto, estimado en unos 6.700 millones de euros, ha supuesto colocar las vías en los 450 kilómetros del corredor que une las dos ciudades santas, además de su superestructura (la electrificación, y los sistemas de seguridad y comunicación), y su posterior explotación.
El consorcio que a finales de 2011 se hizo con este contrato está integrado por las empresas públicas Renfe, Adif e Ineco, y las privadas OHL, Cobra (ACS), Indra, Consultrans, Copasa, Dimetronic, Imathia e Inabensa. Talgo completa el grupo como suministrador de los trenes, un total de 35 AVEs, además de uno especial para la familia real árabe.